El embarazo humano se divide en tres trimestres, cada uno de aproximadamente tres meses de duración.
Es importante que las mujeres embarazadas reciban atención prenatal regular para garantizar un desarrollo saludable.
Los pequeños dedos de las manos y de los pies de tu bebé comienzan a formarse esta semana y los brazos pueden flexionarse.
La cabeza del bebé, que se encuentra casi pegada al pecho, ha estado creciendo y es bastante grande en comparación con el resto del cuerpo, los órganos reproductivos internos, como los testículos y los ovarios, comienzan su formación.
En la semana 10, todos los órganos vitales del bebé se han formado y han comenzado a funcionar juntos. Ocurren cambios externos, como la separación de los dedos de los pies y de las manos. Esta semana también marca el final del período embrionario, la semana siguiente tu bebé será oficialmente un feto.
A partir de esta semana, y hasta la semana 20, su bebé crecerá rápidamente, aumentando su tamaño de 5 centímetros a, aproximadamente a 20 centímetros desde la coronilla hasta el cóccix.
los órganos reproductores del bebé se están desarrollando rápidamente, los genitales externos de los varones y las mujeres son bastante similares en apariencia hasta el final de la semana 11.
El cerebro de su bebé continúa desarrollándose y las uñas de los dedos de los pies y de las manos comienzan a formarse. Las cuerdas vocales se forman durante esta semana, que es la última del primer trimestre.
¡Los riñones de tu bebé ya están funcionando! Ahora, al tragar líquido amniótico, su bebé es capaz de eliminarlo mediante la orina. Y los intestinos se ubicarán en el abdomen, ya que en este momento tienen suficiente lugar para hacerlo.
Al comenzar el segundo trimestre del embarazo, tu placenta está desarrollada y proporciona al bebé oxígeno y nutrientes, además de permitirle la eliminación de desechos. La placenta también produce las hormonas progesterona y estrógeno, que ayudan a llevar adelante el embarazo.
Los párpados del bebé se han fusionado para proteger los ojos a medida que se forman. Tu bebé también será capaz de ponerse el dedo pulgar en la boca, aunque los músculos que controlan la succión todavía no están completamente desarrollados.
En esta semana, han aparecido algunos vellos delgados en el rostro del bebé. Este vello suave e incoloro se denomina «lanugo» y cubrirá la mayor parte del cuerpo de su bebé hasta que caiga, justo antes del parto.
Los genitales del del bebé se han desarrollado completamente, pero es posible que todavía no se puedan detectar en una ecografía. Además, su bebé comienza a producir las hormonas tiroideas, ya que las glándulas tiroideas han madurado. Su bebé pesa alrededor de 1,6 onzas (45 gramos) y mide unas 3,5 pulgadas (9 centímetros) de la coronilla al cóccix.
La piel de su bebé, que se ha estado formando continuamente, es tan fina y translúcida que pueden verse los vasos sanguíneos a través de ella. Continúa el crecimiento de vello de las cejas y la cabeza. Las orejas del bebé casi han llegado a su posición final, aunque todavía se encuentran un poco bajas en la cabeza.
Internamente, la estructura ósea del bebé continúa desarrollándose. El desarrollo de los músculos también continúa y es probable que su bebé esté realizando muchos movimientos con la cabeza, la boca, los brazos, las muñecas, las manos, las piernas y los pies.
Su bebé pesa alrededor de 3,9 onzas (110 gramos) y mide unas 4,7 pulgadas (12 centímetros) de la coronilla al cóccix. Su bebé puede sostener erguida la cabeza y el desarrollo de los músculos faciales ya le permite realizar una variedad de expresiones, como fruncir el ceño.
Su bebé todavía es muy pequeño, ya que sólo mide 5,1 pulgadas (13 centímetros) de la coronilla al cóccix y pesa 4,9 onzas (140 gramos). La placenta, que provee de nutrientes y oxígeno al feto y permite la eliminación de desechos, continúa su crecimiento para alojar al bebé
Las orejas llegan a su posición final y sobresalen de la cabeza. ¡Y comience a practicar las canciones de cuna porque en las próximas semanas su bebé será capaz de escuchar! Los huesos del oído medio y las terminaciones nerviosas del cerebro se están formando para que su bebé pueda escuchar sonidos como los latidos de su corazón o el movimiento de la sangre a través del cordón umbilical. ¡Es posible que el bebé hasta se asuste de los sonidos fuertes! Los ojos del bebé también se están formando. En este momento, miran hacia adelante en vez de hacia los costados y es posible que las retinas puedan detectar los rayos de luz de una linterna si la apunta hacia el abdomen.
este momento, los huesos del bebé se habían estado formando, pero aún eran blandos. En esta semana, comienzan a endurecerse u osificarse. Algunos de los primeros huesos que se osifican son los que forman las clavículas y las piernas.
El bebé ahora está cubierto por una sustancia cerosa blanca que recibe el nombre de » vérnix caseosa». Está ayuda a proteger la delicada piel del bebé y evita que se agriete o se paspe. Los bebés prematuros suelen estar cubiertos por esta capa cremosa al nacer. El bebé todavía es muy pequeño, pero en esta semana comienza la formación de tejido adiposo que ayudará a mantener la temperatura del bebé después del nacimiento. Durante el último trimestre, su bebé generará más capas de tejido adiposo que lo ayudarán a mantener la temperatura corporal y serán utilizadas como elemento de protección.
Ya ha pasado la mitad del embarazo! Han pasado 20 semanas desde el inicio de su embarazo y su bebé ha crecido significativamente desde la primera división celular. Ahora pesa unas 11 onzas (312 gramos) y mide unas 6,3 pulgadas (16 centímetros) desde la coronilla hasta el cóccix. cada vez más lugar en su útero y este crecimiento continuo hará presión sobre sus pulmones, su estómago, su vejiga y sus riñones.
Debajo de la vérnix caseosa (una capa protectora cerosa) la piel se está haciendo más gruesa y forma capas. También continúa el crecimiento de las uñas y del cabello.
El líquido amniótico que ha protegido y sostenido a su bebé en el útero cumple ahora otra función. El grado de desarrollo de los intestinos permite absorber cantidades pequeñas de azúcar del líquido que su bebé traga. Estas pequeñas cantidades de azúcar pasarán al intestino grueso a través del sistema digestivo. Sin embargo, todos los nutrientes del bebé siguen proviniendo de usted a través de la placenta.
ahora, el hígado y el bazo del bebé han sido los responsables de la producción de glóbulos rojos. (El hígado del feto deja de producir glóbulos rojos unas semanas antes del parto y el bazo lo hace en la semana 30). Pero ahora los espacios de la médula ósea se han desarrollado lo suficiente para también contribuir en la formación de glóbulos rojos y la médula ósea se convertirá en el centro más importante de producción de glóbulos rojos en el tercer trimestre.
Los sentidos que su bebé usará para aprender sobre el mundo que lo rodea se están formando día a día. Las papilas gustativas ya han comenzado a formarse en la lengua y las terminaciones nerviosas y el cerebro se han desarrollado lo suficiente para que el feto pueda sentir el tacto. Es posible que su bebé comience a experimentar con su nuevo sentido del tacto acariciando su propio rostro, chupándose el dedo, o tocando otras partes del cuerpo y mirando cómo se mueven. En los varones, los testículos han comenzado a descender del abdomen; en las mujeres, el útero y los ovarios ya están en el lugar adecuado y la vagina se ha formado totalmente.
Si bien ya comienza a acumularse grasa en el cuerpo del bebé, la piel todavía está floja, lo que le da al bebé un aspecto arrugado. La rutina de ejercicios diarios del bebé incluye mover los músculos de los dedos de las manos y los pies, de los brazos y las piernas regularmente. Como consecuencia de esto, es posible que usted sienta movimientos más bruscos.
Ahora su bebé pesa un poco más de 1 libra (454 gramos). Si en esta semana se iniciara el trabajo de parto prematuro y naciera el bebé, éste podría sobrevivir con la ayuda de asistencia médica experta, pero el niño podría quedar con problemas de salud permanentes desde leves hasta graves. Con el avance de la investigación y el conocimiento en este campo de la medicina fetal, el pronóstico a largo plazo de los bebés prematuros mejora año tras año.
Su bebé todavía recibe oxígeno a través de la placenta. Pero una vez que se produzca el nacimiento, los pulmones del bebé comienzan a obtener el oxígeno por sí mismos. Para prepararse, los pulmones del bebé están desarrollando la habilidad de producir surfactante es una sustancia que hace que los alvéolos pulmonares se mantengan armados y no se peguen cuando exhalamos, permitiéndonos respirar correctamente.
Dado que el desarrollo del oído interno –que controla el equilibrio del cuerpo– ha finalizado, el bebé puede diferenciar cuando está boca abajo y cuando no mientras flota y realiza movimientos en el líquido amniótico.
Posiblemente se haya dado cuenta de que su bebé tiene períodos de descanso y de actividad. Notará que hay más actividad fetal cuando usted está quieta. La audición del bebé también ha continuado su desarrollo y tal vez el niño sea capaz de escuchar su voz.
Si bien los ojos de su bebé han permanecido cerrados por los últimos meses, pronto se abrirán y comenzarán a pestañar. Dependiendo de la raza, algunos bebés nacerán con ojos azules o grises azulados (que pueden cambiar de color en el primer año de vida) y otros nacerán con ojos marrones u oscuros. Las pestañas comienzan a crecer y se genera más cabello en la cabeza.
Su bebé, que pesa un poco más de 2 libras (907 gramos), todavía se ve arrugado, pero continuará aumentando de peso a ritmo constante durante las próximas 14 semanas hasta el nacimiento.
En esta primera semana del tercer trimestre, el bebé ya tiene un aspecto similar al que tendrá al nacer, salvo porque es más delgado y pequeño. Los pulmones, el hígado y el sistema inmunológico todavía tienen que madurar, pero si el niño naciera ahora, seguramente tendría posibilidades de sobrevivir.
A medida que la audición continúa desarrollándose, su bebé comenzará a reconocer su voz y la de su pareja. Los sonidos se escucharán amortiguados, ya que los oídos todavía están cubiertos por una sustancia cerosa (vérnix) que protege la piel y evita que se agriete con el líquido amniótico.
Su bebé pesa alrededor de 2 libras y 2 onzas (1.000 gramos) y mide unas 10 pulgadas (25 centímetros) de la coronilla al cóccix. En la próxima consulta prenatal, es posible que su médico le indique si el bebé está ubicado de cabeza o de nalgas en su vientre. Los bebés que estén colocados de nalgas tendrán que nacer mediante una cesárea. Sin embargo, su bebé todavía dispone de dos meses más para cambiar la posición; no se preocupe si ahora se encuentra de nalgas. La mayoría de los bebés cambian de posición solos.
Los pliegues y surcos del cerebro del bebé continúan su crecimiento y expansión. Además, el bebé sigue formando más capas de grasa y continúa el crecimiento de su expansión. Además, el bebé sigue formando más capas de grasa y continúa el crecimiento del cabello.
El bebé continúa estando activo y esos primeros movimientos suaves se han transformado en patadas y sacudones que pueden llegar a dejarla sin aire. Si nota una disminución en el movimiento del feto, cuente las patadas. Su bebé debe moverse, por lo menos, unas 10 veces en dos horas. Si su bebé hace menos de 10 movimientos, hable con su médico
En este momento, su bebé pesa unas 3 libras (1.400 gramos), mide unas 10,8 pulgadas (27 centímetros) de la coronilla al cóccix y continúa aumentando de peso y generando más capas de grasa. Esta grasa hace que el bebé tenga un aspecto menos arrugado y le ayude a mantener su temperatura corporal después del parto.
Como preparación para poder respirar por sí mismo después del parto, su bebé imitará los movimientos respiratorios moviendo reiteradamente el diafragma. Su bebé hasta tendrá hipo, que usted podrá sentir como temblores rítmicos en su útero.
En este momento, su bebé está orinando varias tazas de orina por día en el líquido amniótico. También está tragando líquido amniótico, que se regenera completamente varias veces por día. El exceso de líquido en el saco amniótico (conocido como “polihidramnios”) suele indicar que el bebé no está tragando normalmente o que existe una obstrucción gastrointestinal. Cuando hay menos líquido amniótico de lo normal en el saco (oligohidramnios) suele indicar que el bebé no está orinando con normalidad, posiblemente a causa de un problema en los riñones o las vías urinarias. Su médico medirá el nivel de líquido amniótico como parte de una ecografía de rutina.
Se están llevando a cabo los últimos toques en el bebé para crear una obra maestra. Las pestañas, las cejas y el cabello en la cabeza del bebé son evidentes. El vello, denominado «lanugo”, que ha cubierto a su bebé desde el comienzo del segundo trimestre comienza a caer, aunque parte se mantiene en los hombros y la espalda hasta el nacimiento.
El bebé ya mide aproximadamente 11,4 pulgadas (29 cm) y pesa alrededor de 4 libras (1.800 gramos). Si diera a luz ahora, el bebé tendría excelentes probabilidades de supervivencia fuera de su vientre.
Durante estas últimas semanas antes del parto, los miles de millones de neuronas del cerebro del bebé lo están ayudando a aprender sobre el ambiente dentro del útero. Su bebé puede oír, sentir y hasta ver algo. Los ojos del bebé pueden detectar la luz y las pupilas se pueden contraer o dilatar como respuesta a la luz. Al igual que un recién nacido, su bebé duerme la mayor parte del tiempo e incluso experimenta la etapa de movimiento rápido de los ojos (REM por su sigla en inglés). Ésta es la etapa del sueño durante la cual tenemos los sueños más vívidos.
Los pulmones del bebé ya casi están completamente formados. La grasa continuará depositándose en el cuerpo del bebé para protegerlo y abrigarlo. Los bebés aumentan considerablemente de peso en las últimas semanas antes del nacimiento.
La ingesta de calcio es de suma importancia durante el embarazo, ya que el bebé extraerá calcio de la madre para formar y endurecer sus huesos. Si una mujer embarazada no toma suficiente calcio durante el embarazo, sus huesos pueden verse afectados ya que el feto, al crecer, extraerá minerales de la estructura ósea de la madre a medida que los necesita.
La sustancia cerosa (vérnix) que recubre la piel del bebé se hace más gruesa, mientras que el lanugo desaparece completamente.
Su bebé ya pesa unas 5 libras y 5 onzas (2.400 gramos), pero durante esta semana comienza un período de rápido aumento de peso: ¡aproximadamente de 8 a 12 onzas (226 a 340 gramos) por semana! La grasa se comienza a depositar en todo el cuerpo del bebé, especialmente alrededor de los hombros.
A causa de su creciente tamaño, su bebé está algo apretado dentro del útero. Por lo tanto, los movimientos fetales disminuyen, pero pueden ser más fuertes y bruscos. Si su bebé está colocado de cabeza, ésta se apoyará en su hueso pubiano como preparación para el parto.
El pequeño y arrugado feto que ha visto en ecografías anteriores se ha convertido en un bebé casi regordete. Hay grasa acumulada en las mejillas de su bebé y los poderosos músculos para succionar ayudan a que la cara de su bebé se vea rellena. Su bebé pesa ahora un poco menos de 6 libras (2.721 gramos).
Los huesos que forman el cráneo del bebé pueden moverse uno con relación al otro y superponerse mientras la cabeza del bebé esté dentro de su pelvis. Este fenómeno permite que la cabeza se abra paso a través del canal de parto. No se sorprenda si su bebé nace con una cabeza puntiaguda o deforme. Después de unas horas o días, su bebé recuperará la forma redondeada.
¡Esta semana a su bebé se lo considera a término! Pero su bebé todavía no ha dejado de crecer. Continúa desarrollando grasa a una velocidad de 12 gramos (media onza) por día. En general, los varones pesan más que las niñas al nacer.
Su bebé ha desarrollado suficiente coordinación como para poder asir algo con los dedos. Si se le muestra una luz brillante, su bebé puede girar hacia ella en su útero.
Su bebé pesa alrededor de 6 libras y 6 onzas (2.900 gramos) y mide unas 13,4 pulgadas (34 centímetros) de la coronilla al cóccix. Aunque todavía se sigue acumulando grasa, la producción es menor. Notará que el aumento de peso ha disminuido o cesado.
Dado que el bebé ha contado con los músculos para succionar y tragar líquido amniótico, se han estado acumulando desechos en sus intestinos. Las células que han despedido los intestinos, las células epidérmicas muertas y el lanugo son algunos de los materiales de desecho que forman el meconio, las primeras deposiciones negras verdosas y espesas del bebé.
Si el bebé es un varón, los testículos han descendido al escroto, a menos que haya un problema denominado testículo no descendido. Si el bebé es una mujer, los labios vaginales ya están completamente formados
Los cordones umbilicales, que transportan nutrientes de la placenta al bebé, varían de tamaño, pero, por lo general, tienen unas 22 pulgadas (55 centímetros) de longitud y media pulgada de (1-2 centímetros) de grosor. A veces, el cordón umbilical puede enrollarse alrededor del cuello del bebé. Generalmente, esto no causa problemas, aunque puede ser necesario realizar una cesárea si genera presión en el cordón umbilical durante el parto. Mucho menos común es la existencia de un verdadero nudo. Esto sólo ocurre en el 1% de los embarazos.
La mayor parte del vérnix que cubría la piel del bebé y el lanugo han desaparecido. Su cuerpo ha estado suministrando anticuerpos al bebé a través de la placenta, que ayudarán al sistema inmunológico del bebé a luchar contra infecciones en los primeros 6-12 meses de vida.
¡Después de tantas semanas de expectativa y preparación, su bebé finalmente ha llegado! O quizás no. Solamente el 5% de las mujeres dan a luz en la fecha estimada por el médico y muchas madres primerizas deben esperar hasta dos semanas más para el arribo del bebé.
Los bebés que nacen en la semana 40 pesan, en promedio, unas 7 libras y 4 onzas (3.300 gramos) y miden aproximadamente 20 pulgadas (51 centímetros). No espere que su bebé se vea como un muñeco perfecto. Los recién nacidos, por lo general, tienen la cabeza deformada temporalmente, por haber tenido que pasar por el canal de parto, y suelen estar cubiertos por vérnix y sangre. La piel del bebé puede aparecer decolorada, con partes secas o con erupciones. Todas estas variaciones son normales.