Introducción

Roncar es relativamente común durante el embarazo. Aunque nadie sabe exactamente cuál es la estadística entre las embarazadas, tiende a ser más problemático durante el tercer trimestre. En una encuesta realizada, casi un cuarto de las mujeres reportaron que roncaban y otro 25% dijo que lo hacía esporádicamente en la última semana de su embarazo.

El ronquido ocurre cuando tus vías respiratorias se obstruyen y esto hace imposible que respires adecuadamente. Como resultado, empiezas a hacer ruidos extraños mientras duermes, estos ruidos pueden ser muy fuertes y molestos. Puedes también experimentar dificultad para respirar durante la noche o notar que en ese momento estás particularmente congestionada de las narices. Cuando esto sucede durante el embarazo, se dice que tienes “ronquidos relacionados al embarazo”.

Cuando esto sucede durante el embarazo, se dice que tienes “ronquidos relacionados al embarazo”

Pero… ¡yo nunca he roncado!

Si tú no roncabas antes de embarazarte puedes pensar que tienes algún problema, pero trata de no preocuparte, el ronquido es muy común durante el embarazo. De hecho cerca del 30% de las embarazadas roncan en algún momento de su embarazo, particularmente durante el segundo y el tercer trimestre. En algunas, este problema desaparece después del parto pero en otras, se hace crónico.

¿Es posible que yo vaya a roncar?

Es muy difícil determinar quién tiene un riesgo mayor para roncar durante el embarazo, de hecho, casi todas las mujeres presentan este problema en algún momento del embarazo. Sin embargo, se han observado algunos factores que pueden incrementar el riesgo del ronquido relacionado al embarazo.
Estos factores incluyen

  • Ganancia de peso excesiva
  • Estar obesa durante el embarazo
  • Tener un cuello más ancho (las mujeres que roncan tienden a tener un cuello que puede ser un centímetro más ancho que el de las mujeres que no roncan)
  • Cuando padeces de asma relacionada al embarazo.

¿Por qué ronco?

Un reciente estudio realizado en la Universidad de Edimburgo ha revelado una de las causas. Se ha observado que durante el embarazo las vías respiratorias superiores de las embarazadas se obstruyen. Conforme se va subiendo de peso, la grasa puede infiltrar los músculos de la faringe o depositarse en los tejidos suaves del cuello y alrededor de las vías respiratorias superiores, lo que hace que el cuello se ensanche y se estrechen los pasos del aire contribuyendo a que se presente el ronquido.

Existen también otros factores que contribuyen a la aparición del ronquido en la embarazada. Durante todo el embarazo, tu cuerpo ha aumentado su flujo sanguíneo casi hasta en un 50%. Este aumento ayuda a que tú y tu bebé se nutran adecuadamente. Sin embargo, esto hace que los vasos sanguíneos de tu organismo –que no estaban acostumbrados a llevar una carga tan fuerte de sangre- se hagan más anchos. La expansión de los vasos sanguíneos de la nariz y de la garganta provoca que las mucosas se hinchen también y esto trae como resultado una mayor producción de moco que hace difícil respirar.

¿Es peligroso roncar durante el embarazo?

Existe alguna evidencia que sugiere que el ronquido durante el embarazo puede incrementar la posibilidad de desarrollar ciertas complicaciones relacionadas con el embarazo. Un estudio Sueco realizado en el año 2000 encontró una liga entre la hipertensión y la preeclampsia y el ronquido relacionado con el embarazo.

Se encontró también que existía la posibilidad de que hubiera complicaciones en los bebés de madres roncadoras relacionadas a un retardo en el crecimiento.

¿Qué es la “apnea del sueño”?

Algunas mujeres saben que roncan mucho durante la noche. Pueden incluso notar que llegan a despertarse en la noche. Si estás en esta situación, entonces sufres de una condición llamada “apnea del sueño”.

Esto significa que, mientras duerme, la persona experimenta períodos de más de 10 segundos durante los que no respira, estos períodos de «apnea» se identifican por un largo período de silencio justo luego de que la persona ha estado roncando. Estos son seguidos por un ronquido o jadeo súbito cuando se reanuda la respiración y luego se comienza a roncar de nuevo. Si una persona sufre de apnea del sueño, este ciclo generalmente se repite varias veces durante la noche.

Esto hace imposible que tus pulmones reciban el oxígeno necesario y te despiertas de inmediato. Es importante que si estás en este caso, lo comentes con tu médico ya que una apnea prolongada (que no te despiertes instantáneamente o que se repita muchas veces en la noche), puede ser peligrosa para el bebé y puede disminuir tu nivel de energía muy severamente. Mientras más se ronca, menos se descansa.

Es más frecuente en mujeres que ya estaban con sobre peso u obesas antes del embarazo. 
Esta falta de oxígeno evita que realmente  descanses, pero además la falta de oxígeno daña de manera importante a tu bebé.

Este problema lo debe de saber  tu médico cuanto antes para que sea tratado.

Este problema lo debe de saber tu médico cuanto antes para que sea tratado

¿Qué puedo hacer?

Cuando el ronquido se debe a problemas nasales, se puede prevenir de la siguiente manera:

  • Note acuestes después de cenar
  • Duerme de lado. Cuando duermes sobre tu espalda, la lengua y el paladar blando se  van hacia atrás y bloquean la entrada y salida de aire.
  • Eleva más tu cabeza  con una almohada
  • No debes de fumar, beber alcohol o  tomar pastillas para dormir, impiden el flujo normal de aire hacia tus pulmones y no es recomendable consumirlos durante el  embarazo.
  • Trata de no subir de peso más de lo indicado por tu médico.
  • Evita las bebidas con cafeína ya que esta sustancia puede estrechar aún más tus vías respiratorias.

Referencias

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