Muerte del Feto durante el embarazo
Complicaciones, Embarazo

Muerte del Feto durante el embarazo, Óbitos

Introducción

En la mayoría de las ocasiones, la pérdida es inesperada puesto que hasta la mitad de los óbitos ocurren en embarazos cuyo curso había sido completamente normal. El 14 por ciento de las muertes fetales ocurren durante el parto mientras que el 86 por ciento tiene lugar antes del mismo.

La muerte fetal es una de las situaciones más desconcertantes para el médico, la paciente embarazada y su familia, ya que sus causas son múltiples y a veces desconocidas, así como sus factores contribuyentes.

DEFINICIÓN

La definición médica de “muerte en útero” es el nacimiento de un bebé que nace sin signos de vida después de las 24 semanas de embarazo. El bebé puede haber muerto durante el embarazo (a esto se le llama muerte intrauterina) o -esto es más raro- durante la labor de parto o durante el nacimiento (a esta situación se le denomina “muerte intraparto”)

Aunque algunos autores definen al óbito fetal como “el cese de la vida fetal (no hay latido cardiaco, pulsación del cordón umbilical ni movimientos del feto) a partir de las 20 semanas de gestación y con un peso mayor a 500 gramos”.

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  ¿Otro bebé?

REFERENCIAS

Riesgo de parto Pre-Término
Durante, Embarazo, Semanas 25 - 40

Riesgo de parto Pre-Término

Definición

Lo normal de un embarazo es que dure 40 semanas hasta el parto, en consecuencia, cuando el parto se produce entre la semana 37 y 42, se habla de un bebé “nacido a término”.

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Cuando el parto se produce antes de las 37 semanas de embarazo y después de las 23 semanas o 161 días calculados desde el primer día de la última menstruación, es cuando se puede hablar de nacimiento prematuro o bebés nacidos antes de término.

Mientras más corto es el período del embarazo, más alto es el riesgo de las complicaciones. Los bebés que nacen en forma prematura tienen un alto riesgo de muerte en sus primeros años de vida. Existe también un alto riesgo de desarrollar serios problemas de salud como: parálisis cerebral, enfermedades crónicas a los pulmones, problemas gastrointestinales, retraso mental, pérdida de la visión y el oído.

 

Clasificación

 

El parto pretérmino o prematuro puede ser:

  • Espontáneo
  • Por rotura de las membranas (de la bolsa de aguas)
  • Inducido por razones obstétricas como por ejemplo: un deterioro del medio intrauterino por infección, retraso del crecimiento intrauterino o peligro significativo de la salud materna en la preeclampsia y cáncer.

Basado en la edad gestacional, o sea, en las semanas que llevas de embarazo, el bebé se considera:

  • Prematuro extremo cuando el bebé nace antes de la semana 28 (5%)
  • Prematuro severo cuando nace entre la semana 32 y 33
  • Prematuro moderado si nace entre la semana 34 y la 36.

Con bajo peso al nacer

La clasificación basada en el peso, reconoce también el grupo de los que son de muy bajo peso al nacer, que nacen con menos de 1500 g. y aquellos que pesan menos de 1000 g.

 

Casi todos los recién nacidos en estos dos últimos grupos han nacido prematuramente. Pero también se incluyen los que nacen a término y que son pequeños para la edad gestacional. Estos últimos bebés pueden tener pesos inferiores al rango normal por otros motivos que el parto prematuro, como es el caso del consumo del tabaco y alcohol durante el embarazo

¿Qué tan peligroso es un parto prematuro para el bebé?

Es posible que hayas leído en los diarios sobre bebés que nacen mucho tiempo antes de término y que gozan de buena salud, pero es importante que sepas que son casos excepcionales. Los bebés que nacen antes de término tienen un riesgo muy alto de sufrir problemas cerebrales y otros problemas neurológicos, respiratorios y digestivos, e incluso de morir en el primer mes de vida.

Lamentablemente, también corren el riesgo de sufrir un retraso en su desarrollo y tener problemas de aprendizaje en la escuela, lo que demuestra que los efectos del nacimiento prematuro pueden ser devastadores durante toda la vida del niño. Cuanto más tiempo antes de término nazca el bebé, más problemas es probable que tenga.

Causa

 

A pesar que existen varios factores conocidos que llevan al nacimiento prematuro, en casi la mitad de todos los nacimientos de este tipo se desconoce su causa.

El parto es un proceso complejo que involucra muchos factores. Se han identificado cuatro diferentes vías que pueden resultar en el nacimiento prematuro y tienen considerable evidencia:

  • Activación precoz del sistema hormonal del feto.
  • Sobre distensión uterina (por ejemplo en el caso de embarazo múltiple).
  • Hemorragia intrauterina.
  • Inflamación o infección.

La activación de una o más de estas vías puede haber ocurrido gradualmente a lo largo de semanas, incluso meses.

En la práctica, los investigadores han identificado también una serie de factores (se les llama “factores de riesgo”) que se asocian con un nacimiento pretérmino, sin embargo, una asociación no establece que esa sea la causa.

 

Factores de riesgo

 

Existen muchos factores de riesgo para un parto prematuro. Algunos de ellos son reversibles, es decir, se pueden cambiar, pero otros son permanentes. La identificación de estos factores idealmente antes del embarazo o al inicio de la gestación, podría llevar a intervenciones que podrían ayudar a prevenir esta complicación.

Sin embargo, sabemos que este objetivo es difícil de lograr por distintas razones:

 

  •  El parto prematuro puede ocurrirle a cualquier mujer. Aunque una mujer haga todo “bien” durante el embarazo, puede, de todas formas, tener un bebé prematuro.
  •  La causalidad de los factores de riesgo es difícil de probar.
  •  En realidad, solamente la mitad (aproximadamente) de las mujeres que tienen un parto prematuro pertenece a un grupo de riesgo conocido.

Se ha comprobado que las mujeres que tienen el riesgo más alto de tener un parto prematuro son aquellas que están dentro de los siguientes grupos:

Factores demográficos:

  • edad materna (menor de 18 años o mayor de 35 años),
  • estado civil (solteras),
  • bajo nivel socioeconómico y bajo nivel cultural (aunque son independientes uno del otro),

o    Se considera que las condiciones estresantes, el trabajo pesado y largas horas laborales y de pie, tienen una probable asociación con la prematuridad.

 

Antecedentes obstétricos:

  • Historial médico familiar de nacimiento prematuro. Eso significa que alguien de tu familia tuvo un bebé prematuro.
  • Tú misma ya has tenido un parto o bebé prematuro.  El riesgo de recurrencia de un parto pretérmino en mujeres con antecedentes de prematuridad, oscila entre 17% y 40 %.
  • Con más de tres abortos  espontáneos.
  • El intervalo entre embarazos hace una diferencia ya que las mujeres con un período de 6 meses o menor entre un embarazo y el siguiente tienen un aumento del doble en partos prematuros.
  • Fumar cigarrillos durante el embarazo. El hábito de fumar juega un papel mucho más significativo en el retardo del crecimiento intrauterino que en el parto pretérmino. Sin embargo, las mujeres fumadoras tienen 20 a 30 % más probabilidad de tener un parto de pretérmino.
  • Tomar alcohol.
  • Sufren maltrato físico, sexual o emocional.
  • Consumen drogas ilícitas durante el embarazo.
  • Anemia.
  • Obesidad: no conlleva directamente a un nacimiento pretérmino, pero se asocia con la diabetes y la hipertensión arterial que son factores de riesgo por sí mismos.
  • Sufren maltrato físico, sexual o emocional.

Factores del embarazo actual:

  • Aumento de peso escaso  (especialmente aquellas que empiezan el embarazo con un peso normal o bajo peso) o aumento excesivo.
    · La adecuada nutrición materna es importante, pues las mujeres con un bajo índice de masa corporal tienen un mayor riesgo de prematuridad. Además, las mujeres con un estado nutricional deficiente también pueden estar deficientes en vitaminas y minerales.
  • Sangrado vaginal: Si bien las hemorragias en el tercer trimestre pueden ser una señal de placenta previa o desprendimiento placentario – las cuales se producen frecuentemente de manera prematura – incluso el sangrado en meses iniciales no causado por estos dos trastornos se vincula a una mayor probabilidad de parto prematuro.
  • Están embarazada de mellizos o más bebés
    · El embarazo múltiple constituye uno de los riesgos más altos de prematurez. Casi el 50 % de los embarazos dobles y prácticamente todos los embarazos múltiples con más de dos productos, terminan antes de completar las 37 semanas , siendo su duración promedio, más corta cuanto mayor es el número de productos que crecen in útero en forma simultánea (36 semanas para los gemelares, 33 para los triples y 31 para los cuádruples).
  • Estar embarazada de un bebé que tenga ciertos defectos al nacimiento como defectos cardiacos congénitos o espina bífida
  • Infecciones: Las mujeres que tienen una infección en el tracto vaginal o las vías urinarias NO tratada durante el embarazo. Ciertas enfermedades de transmisión sexual.
  • Cambios en el líquido amniótico:Las mujeres con cantidades anormales de líquido amniótico, como el “polihidramnios” (exceso) o el “oligohidramnios” (menos de lo normal), también están en situación de riesgo.
  • Problemas crónicos de salud en la madre, como presión arterial alta, diabetes y trastornos de la coagulación, asma, enfermedades del corazón o tiroides.
      • Las condiciones de salud materna aumenta el riesgo de prematuridad y, a menudo, el parto debe ser inducido por razones médicas.
  • Presentan fiebre elevada por alguna causa
  • Se hicieron alguna cirugía abdominal durante el embarazo

Hay una serie de trastornos anatómicos en ciertas mujeres que evitan que el bebé llegue a término.

  • Algunas mujeres tienen un cuello uterino débil o demasiado corto (el más fuerte pronóstico de un parto prematuro); a este problema se le denomina “insuficiencia cervicouterina”.
  • Cuando la forma del útero no es normal.
  • Mal funcionamiento de la placenta.

Estos son los factores en los que más se presentan, pero recordemos que muchas mujeres que no presentan ninguno de estos factores de riesgo, también  pueden tener partos prematuros.

¿Cómo se puede confirmar si estoy en riesgo?

En cada cita prenatal, tu médico te pedira una serie de exámenes de laboratorio de rutina cuyos resultados, sumados a la información que tú das acerca de tu historial médico y tu estilo de vida, lo mantendrán al tanto de tu salud y la del bebé durante el embarazo.

¿Y qué pueden revelar tu historia médica, los factores de tu estilo de vida y los análisis de laboratorio que te realizan?

  • Que todo está bien: si los resultados muestran que tu embarazo progresa normalmente, puedes estar tranquila hasta tu próxima cita.
  • Existen síntomas que hacen necesario un monitoreo más cercano y otras pruebas de laboratorio: por ejemplo, si tienes la presión arterial elevada, esto puede no ser un problema por sí mismo, pero tu médico necesitará asegurarse de que NO está asociado a preeclampsia que puede incrementar tu riesgo de parto prematuro.
  • Tienes definitivamente riesgo de parto prematuro: Algunos resultados de los estudios de laboratorio mostrarán a tu médico inmediatamente que estás en riesgo por problemas relacionados con tu salud en general, con tu abdomen o con tu bebé. Esto lo obligará a llevar un monitoreo muy cercano durante el resto del embarazo.

¿Cuáles son los estudios de laboratorio e imagen complementarios que me tendrían que hacer?

El médico puede solicitarte algunos estudios que le ayudarían a detectar los problemas potenciales que se están presentando y decidir un plan de cuidados y tratamiento para el resto del embarazo. Estos podrían ser:

  • Análisis de sangre y orina
  • Muestras vaginales
  • Ultrasonidos

Estos estudios pueden revelar si tienes alguna infección, diabetes o alguna enfermedad crónica, por ejemplo, algún problema renal. En algunos casos, esto puede ser causa de un parto prematuro.

Los ultrasonidos pueden revelar una serie de factores que se han asociado a parto prematuro: Entre estos se incluye:

  • El tamaño del cuello uterino.
  • El tamaño de tu abdomen (útero).
  • El tamaño y posición del bebé.
  • La cantidad de líquido amniótico.

Si los resultados revelan cualquier problema potencial, el médico tomará acción tan pronto como sea posible.

¿Cuáles son los síntomas de un parto prematuro?

Algunas de las señales del parto prematuro son:

  • Cuatro o más contracciones en una hora que se presenten antes de la semana 37 del embarazo.
  • Salida de líquido por la vagina lo que puede sugerir que se ha roto la bolsa de líquido amniótico.
  • Cambio en el color del flujo vaginal, o sangrado de la vagina
  • La sensación de que el bebé está empujando hacia abajo. A esto se le llama presión pélvica.
  • Dolor débil en la parte baja de la espalda o del abdomen
  • Cólicos como si tuvieras la regla o el período
  • Dolor de abdomen con o sin diarrea

Puedes ayudar a prevenir el parto prematuro tomando conciencia de tus síntomas y siguiendo algunas instrucciones sencillas. Llama a tu médico o ve al hospital de inmediato si crees que estás por tener un parto prematuro.

Si los síntomas empeoran o no desaparecen después de una hora, llama nuevamente a tu médico o ve directamente al hospital. Si los síntomas desaparecen, reposa el resto del día. Si los síntomas se detienen pero regresan, llama a tu médico nuevamente o vete al hospital.

No es necesario que tengas todos estos síntomas para tener un parto prematuro. No dejes que nadie te diga que estos síntomas son “malestares normales del embarazo”. Actúa y llama a tu médico aunque sólo tengas uno de ellos.

¿Cómo puedo reducir el riesgo de un parto prematuro?

Es muy importante que todas las mujeres embarazadas conozcan:

  • Cuáles son los factores de riesgo,
  • Cuáles son los síntomas de parto prematuro y
  • Qué hacer si sospechan que pueden estar teniendo un parto prematuro.

No existen garantías, pero hay mucho de lo que puedes hacer para lograr que tu embarazo llegue a término:

  • Asiste a tus visitas médicas prenatales mensuales. Tu médico estará pendiente de los cambios en tu salud y en la de tu bebé. No te olvides de comentarle cualquier síntoma que te preocupe por simple que parezca.
  • Nútrete sanamente. Durante el embarazo necesitas más ácido fólico, calcio, hierro, proteínas y otros nutrientes esenciales. Iniciar la ingesta del ácido fólico antes del embarazo es lo ideal.
  • Atención médica de las enfermedades crónicas. Las enfermedades como diabetes y presión arterial elevada incrementan el riesgo de tener un parto pretérmino. Acude a tu médico para que todo esté bajo control.
  • Sigue las recomendaciones de tu médico acerca de la actividad que puedes desarrollar. Si tienes algún o algunos síntomas de parto pretérmino, tu médico te va a pedir que disminuyas tu actividad y que permanezcas menos tiempo de pie.
  • Evita consumir substancias peligrosas. Si fumas, suspende ahora, el consumo de cigarrillos puede provocar un parto pretérmino y el mismo riesgo se corre con el alcohol y las drogas. Debes considerar también los medicamentos de venta libre, siempre pregunta a tu médico antes de tomar cualquier cosa.
  • Pregúntale a tu médico acerca de la actividad sexual. Tener relaciones sexuales durante el embarazo no es un problema en un embarazo normal, pero puede no ser recomendable cuando hay complicaciones como el sangrado vaginal o problemas con tu cuello (cuello incompetente) o con la placenta, o si hay contracciones
  • Limita el estrés. Ponte límites razonables y respétalos. Date tiempo para descansar diariamente y pide ayuda cuando la necesites.
  • Cuida tu dentadura. Cepíllate y limpia tu boca cuidadosamente todos los días y visita a tu dentista para una limpieza general. Los problemas de las encías están relacionados con partos pretérmino.

Evaluación del cuello del útero: Por otro lado, la evaluación del cuello uterino que se realiza mediante la ecografía en las consultas prenatales, es un método alternativo para la predicción de parto prematuro. Este estudio se realiza entre la semana 18 y la 23 del embarazo y se puede medir la longitud del cuello uterino y estudiar su morfología. Normalmente la longitud del cuello oscila entre 4 y 5 cm.

Pero en aquellas embarazadas con riesgo de parto prematuro la medida es menor, es decir que tendrán el cuello acortado. Con este método de medición el médico ginecólogo puede detectar a casi todas las que tienen algún riesgo y esto le permite que, rápidamente, tome las medidas necesarias para  prevenir el parto prematuro.

Tratamiento cuando se sospecha el riesgo de parto prematuro

Si tu médico sospecha que tienes un riesgo elevado de tener un parto prematuro, te pedirá que acortes el tiempo entre cada cita y que te mantengas en contacto. Incluso es posible que te pida que acudas a una cita con algún especialista.

El tipo de cuidados dependerá principalmente de la razón por la que consideran que tu riesgo es elevado y, en lo posible, se buscará retrasar el parto para que tu bebé permanezca el mayor tiempo posible en tu panza.

Tratamiento cuando se ha iniciado la labor de parto

Cuando las condiciones lo permiten, tu médico tratará de detener la labor de parto para que el embarazo pueda continuar y llegue a término incrementando así las posibilidades del bebé de sobrevivir y nacer sano.

Sin embargo, si el trabajo de parto se ha iniciado, no existen métodos fiables para detener o prevenir el trabajo de parto prematuro en todos los casos.

Todas las acciones médicas consideradas tienen los siguientes objetivos:

  • Inhibir o reducir la fuerza y la frecuencia de las contracciones, retrasando el momento del parto, y
  • Preparar al bebé para este nacimiento adelantado.

Retrasar lo más posible el parto es la primera opción. Esto dará al bebé el mayor tiempo posible para su desarrollo dentro del útero. Tu médico puede recomendarte:

  • Si tienes señales de parto prematuro (o incluso si considera que estás en riesgo de parto prematuro), tal vez tu médico desee hacerte la prueba fFN. fFN significa fibronectina fetal.
    · La fibronectina fetal es una proteína que produce tu cuerpo para mantener al bebé dentro del útero. Cuando tu cuerpo ya está listo para el parto, esta sustancia se diluye y se “escurre” fuera del útero a través de la vagina.
    · La prueba fFN es como un Papanicolaou. Detecta cuánta cantidad de proteína fFN hay en la vagina. Si la prueba indica que no tienes fFN, lo más probable es que el bebé no nazca por al menos en otras 2 semanas.
  • Reposo absoluto en cama. Una posición horizontal reduce la presión en el cuello del útero lo que puede ayudar a que se mantenga cerrado por más tiempo. Además, al evitar movimientos innecesarios también se evita la irritación del útero que puede provocar contracciones.
  • Una buena nutrición y, especialmente, una buena hidratación, son importantes ya que la deshidratación puede ser la causa de contracciones uterinas.
  • Algún medicamento para detener las contracciones aunque estos parece que no tienen un efecto duradero y para ayudar a evitar problemas de salud para su bebé. Estos incluyen:
  1. Corticosteroides. Estos medicamentos aceleran el desarrollo pulmonar de su bebé. También reducen en gran medida el riesgo de problemas de salud en su bebé, como síndrome disneico y hemorragia intraventricular.
  2. Tocolíticos. Estos medicamentos pueden postergar el parto, a menudo durante sólo unos días. Esa demora puede darle tiempo de hacerse tratamiento con corticosteroides y disponer de tener a su bebé en un hospital con una unidad de cuidados intensivos neonatales (NICU, por sus siglas en inglés). Esa unidad es un área del hospital que atiende a los recién nacidos enfermos.
  3. Sulfato de magnesio. Este medicamento puede ayudar a reducir el riesgo de la parálisis cerebral en los bebés prematuros.
  4. Antibióticos para prevenir las infecciones en el bebé

El parto prematuro a veces puede impedirse con esta combinación de medicamentos y reposo, sin embargo, la mayoría de los esfuerzos son aquellos orientados a prevenir complicaciones para el bebé.

Estos medicamentos sólo funcionan si la mujer recibe atención médica rápidamente, por lo que es esencial saber identificar los síntomas.

¿Qué debo hacer si tengo síntomas de parto prematuro?

Llama a tu médico o vete al hospital de inmediato si crees que va a tener un parto prematuro. Tu médico puede indicarte que:

  • Vayas a su consultorio o al hospital para un chequeo
  • Dejes lo que estuvieras haciendo y descanses recostada sobre el lado izquierdo durante una hora

Si los síntomas empeoran o no desaparecen después de una hora, llama a tu médico nuevamente o vete al hospital. Cuando llames a tu médico, asegúrate de decirle a la persona que te atiende que crees que estás teniendo un parto prematuro.

Si no te hacen la prueba fFN, la única manera en que tu médico puede saber si estás por tener un parto prematuro es haciéndote un examen interno del cuello uterino. Si el cuello se está dilatando, es posible que esté comenzando el parto prematuro.

Tú y tu médico forman un equipo y trabajan juntos para que tengas un embarazo sano y un bebé sano. Todo equipo funciona mejor cuando todos sus miembros participan, por lo que estar bien informada sobre el parto prematuro puede ser esencial para ayudarte a prevenirlo.

Habla con tu médico sobre esto y asegúrate de asistir a todas tus citas de cuidados prenatales. El parto prematuro es una de las complicaciones del embarazo que los médicos están luchando por erradicar. Tu participación en esta lucha es tan importante como la de ellos.

¿Qué atención se le da a un bebé prematuro?

Después de nacer, los recién nacidos prematuros son llevados a una Unidad Neonatológica de Cuidados Intensivos. Allí el neonatólogo lo pone en una incubadora, una cuna cerrada en plástico con ambiente controlado diseñada para mantenerlos tibios ya que al nacimiento están expuesto a factores ambientales externos, y procesos fisiológicos propios que ponen en riesgo la estabilidad de la temperatura del bebé.

Su manejo debe de ser mínimo para evitar perdida de energía y limitar su exposición a gérmenes. En algunos casos se usa una atmósfera enriquecida de oxígeno, aunque se trata de evitar ya que puede causar efectos secundarios dañinos como la retinopatía por concentraciones altas de oxígeno. Los bebés prematuros pueden ser dados de alta del hospital cuando ya no necesitan los cuidados intensivos constantes que el hospital provee.

Después de que el bebé sale del hospital, los padres van ajuste ansioso a una acomodación exhausta, y luego cuidado confiado, generalmente este proceso ocurre dentro de los primeros tres meses después de la salida del hospital.

Referencias

Defectos al Nacimiento, E -H

Hipoxia perinatal / Asfixia del nacimiento

ACTUALIZACIÓN JUNIO 2022

DEFINICIÓN

El término “asfixia” se deriva del griego y significa “falta de aire o falta de respiración”.

La asfixia perinatal es una condición caracterizada por un deterioro en el intercambio de gases respiratorios que normalmente realiza el organismo (oxígeno y bióxido de carbono).

Este deterioro da como resultado una disminución del oxígeno (hipoxemia), elevación del nivel de bióxido de carbono (hipercapnia) acompañado de acidosis metabólica (incremento de la acidez del plasma sanguíneo), o una privación total de oxígeno (anoxia)  situación que daña, a cada uno de los órganos y sistemas  del cuerpo en diverso grado según su intensidad y duración.

Sin embargo, el daño más importante se produce en el Sistema Nervioso Central (cerebro)  con graves consecuencias en cuanto a mortalidad y secuelas. La anoxia cerebral es una condición que generalmente resulta en daño cerebral permanente.

¿QUÉ ES EL PERIODO PERINATAL?

El período perinatal suele definirse como el período comprendido entre la semana 28 de gestación y el séptimo día de vida extrauterina (otras definiciones aceptadas abarcan desde la semana 20 de gestación al séptimo día, o desde la semana 20 de gestación al día 28 de vida).

¿CUÁNDO SE PUEDE PRESENTAR LA ASFIXIA PERINATAL?

La asfixia perinatal es la que se puede presentar antes, durante o después del parto y puede producirse por causas que afecten a la  madre, a la placenta y/o cordón umbilical o al propio feto.

Desafortunadamente, la anoxia y la hipoxia son peligros que se presentan  muy frecuentemente durante el momento del parto, por ejemplo, algunas veces, el cordón umbilical puede estar doblado o torcido y esto hace que se impida la llegada de sangre oxigenada al bebé haciendo que no respire.

El tiempo que dure esta situación, o sea, el tiempo que el bebé deje de respirar, determinará la disminución de los niveles de oxígeno. Es así que si el bebé tarda un minuto en respirar, puede tener hipoxia, mientras que si tardó más de tres minutos, es más probable que tenga anoxia.

¿QUÉ SUCEDE DURANTE LA ASFIXIA PERINATAL?

Dado que el periodo perinatal es un periodo muy corto de tiempo. Un bebé con asfixia perinatal es un bebé que nace flácido y sin movimientos.

Algunas veces, el neonatólogo puede estar monitorizando los signos vitales del bebé durante la labor de parto y reconocer de inmediato cuando se presenta una disminución alarmante de oxígeno y asfixia lo que puede provocar que el bebé nazca por cesárea de emergencia.

Otras veces, el bebé nace por vía vaginal pero no llora, está laxo o sin tono muscular y con asfixia perinatal. En ambos escenarios, el equipo médico trabajará de inmediato para hacer que el bebé respire lo antes posible.

Un problema no muy común es el prolapso del cordón umbilical que significa que el cordón salió antes que el bebé y, si además está doblado o torcido, el bebé puede estar sin su fuente de oxígeno y es probable que el médico consideraría necesario realizar una cesárea de emergencia.

¿CUÁL ES LA IMPORTANCIA DE LA ASFIXIA PERINATAL?

La hipoxia perinatal es una agresión al feto o al recién nacido (neonato) debido a la falta de oxigeno general o en diversos órganos.

Su importancia fundamental es que puede contribuir a la aparición de parálisis cerebral y retraso mental.

Los Comités de Medicina Materno-Fetal, del Feto y Recién Nacido de la Asociación Americana de Obstetras y Ginecólogos (AAOG) y de la Academia Americana de Pediatría (AAP) establecen que para que exista asfixia perinatal con posibilidad de causar daño neurológico deben de existir los siguientes factores:

  • Que los bajos niveles de oxígeno también sean causa de acidosis (una condición que aparece cuando se acumula mucho ácido en la sangre del bebé), medida en la sangre de la arteria umbilical (pH menor de 7.00).
  • Persistencia de un valor de 0 a 3, por más de 5 minutos,del test de Apgar (el “puntaje” de APGAR fue creado por la Dra. Virginia Apgar con el objeto de estimar el estado del bebé inmediatamente al nacimiento y determinar si requiere alguna maniobra de apoyo o reanimación cardiopulmonar).
    • Se evalúa al minuto y a los 5 minutos de vida.
    • El Apgar al minuto expresa principalmente la evolución prenatal. El Apgar a los 5 minutos tiene un mayor valor pronóstico en cuanto a la normalidad o potencial anormalidad neurológica y riesgo de mortalidad.
    • El Apgar bajo al minuto (0-3) es significativamente más frecuente a más bajo peso y aumenta el riesgo de mortalidad. El test de Apgar es por lo tanto, una información esencial.
  • Secuelas neurológicas neonatales(por ej., convulsiones, coma, bajo tono muscular).
  • Falla en la funciónde cuando menos dos sistemas (cardiovascular, pulmonar, renal.).

Únicamente en estos casos se puede concluir que ha existido asfixia perinatal.

Actualmente, cuando es necesario dar ventilación a presión positiva al bebé por más de un minuto es otro criterio de asfixia.

¿CUÁLES SON LAS CAUSAS DE LA ASFIXIA?

Los factores de riesgo o factores desencadenantes pueden ser:

PREGESTACIONALES:

Demográficos

  • Edad materna menor o igual a 15 años.
  • Edad materna mayor o igual a 35 años.
  • Primer embarazo.
  • 4 o más embarazos.
  • Talla materna menor o igual 150 -155 cm.
  • Nivel socioeconómico bajo

Antecedentes médicos maternos

  • Diabetes mellitus.
  • Enfermedad renal (ej., infección de vías urinarias).
  • Enfermedad hipertensiva: preeclampsia.
  • Enfermedad cardiaca.
  • Enfermedad endocrina (ej., problemas del tiroides).

Antecedentes obstétricos

  • Aborto: dos o más.
  • Parto pretérmino: dos o más.
  • Muerte perinatal: uno o más.
  • Algún hijo nacido con anomalía congénita.
  • Cesárea previa.

PRENATALES

Embarazo actual

Deterioro en la oxigenación materna por:

  • Anemia materna menor o igual a 10 gramos de hemoglobina.
  • Uso de oxitocina durante la labor de parto (como estimulante de las contracciones).
  • Infección materna durante el embarazo (como puede ser una infección de rubéola en el primer trimestre).
  • Isoinmunización Rh (reacción de la madre al Rh de la sangre del bebé).
  • El feto también puede desarrollar la asfixia si la madre está sufriendo de preeclampsia que se acompaña de aumento de la presión arterial e hinchazón de las extremidades.

Igualmente puede haber mla oxigenación por:

  • Bajo peso del bebé.
  • Embarazo múltiple.
  • Sangrado durante el embarazo antes de las 20 semanas.
  • Sangrado después de las 20 semanas: en la segunda mitad del embarazo, generalmente por desprendimiento prematuro –total o parcial- de la placenta y por la placenta previa.
  • Posición inadecuada de la cabeza del feto en el momento del parto.
  • Gestación post-término (el embarazo se prolongó más allá de la semana 42).
  • Presencia de meconio (la primera evacuación del bebé) en el líquido amniótico.

DURANTE EL PARTO (INTRAPARTO)

  • Cordón umbilical:
    • Prolapso del cordón, (salida del cordón umbilical antes que el bebé),
    • el cordón umbilical está comprimido en algún punto e impide la circulación o,
    • hay circular de cordón que rodea el cuello del bebé.
  • Placenta: La sangre que fluye en la placenta disminuye por varias razones:
    • Elevación de la presión arterial de la madre con toxemia (preeclampsia),
    • insuficiencia placentaria: la placenta no funciona debidamente o tiene alteraciones de su implantación (placenta previa) e irrigación, está desgarrada, o se ha infartado, etc…
    • Abruptio placentae: la placenta se desprende antes del parto.
  • Hipertonía uterina:las contracciones son demasiado fuertes y seguidas lo que provoca una deficiencia en la oxigenación.
  • Ruptura Prematura de membranas: la bolsa se rompe antes del parto. El mayor riesgo asociado a esta patología es la infección de la madre y del feto independientemente de la edad gestacional.
  • La oxigenación materna está deteriorada, la madre sufre de algún problema respiratorio, se encuentra a grandes alturas, tiene alguna cardiopatía, o patología neural, etc…).
  • Parto prolongado.
  • Fórceps(uso de estos instrumentos durante el parto para ayudar a salir al bebé).
  • Cesárea:el riesgo de asfixia fetal en un bebé estable puede ocurrir debido a una baja en la presión arterial de la madre por la posición en la que se encuentra o por la anestesia, lo mismo en los casos en los que se le dificulta al médico extraer al bebé y por aspiración de líquido amniótico.
  • Frecuencia cardíaca fetal anormal(la actividad del corazón está disminuida) por malformaciones cardiovasculares o está deprimida por la presencia de alguna enfermedad neuromuscular o por las drogas depresoras del sistema nervioso central (SNC) administradas a la madre durante el parto.

NEONATALES

  • Macrosomía(el bebé es muy grande y pesa más de 4 kg), desproporción cefalo-pélvica (la cabeza del bebé es demasiado grande para el tamaño de pelvis de la madre).
  • Prematuridad: los estudios muestran que la edad gestacional ideal para el parto se encuentra entre las 37 y 41 semanas. La morbilidad del bebé prematuro está determinada por la dificultad de adaptación a la vida extrauterina debido a la inmadurez de órganos y sistemas.
  • Restricción del crecimiento del bebé en el útero.
  • Bajo peso al nacer: se calcula que los niños de bajo peso al nacer tienen 40 veces más el riesgo de morir que infantes de peso normal al nacer
  • Malformaciones congénitas:constituyen una de las principales causas de muerte prenatal.
  • Cambios en la cantidad de líquido amniótico: poca cantidad de líquido amniótico (oligohidramnios) o demasiado líquido amniótico (polihidramnios). Ambas son señal de alarma en el embarazo.
  • Síndrome de aspiración de meconio(es una afección grave en la cual un recién nacido aspira una mezcla de meconio y líquido amniótico hacia los pulmones cerca del momento del parto).
  • La vía respiratoria del bebé puede estar bloqueada o malformada. Incapacidad del recién nacido para la inflación pulmonar y transición con éxito de la circulación fetal a la cardiopulmonar.
  • Anemia fetal. Las células de la sangre del bebé no son suficientes para transportar el oxígeno necesario.
  • Neumopatías (cualquier enfermedad o trastorno que ocurre en los pulmones o que hace que éstos no trabajen apropiadamente),cardiopatías, etc.

La mayoría de las asfixias se presentan cuando hay asociación de tres o más de estos factores por lo que la identificación de los factores asociados le ayudará al médico para iniciar de inmediato el tratamiento.

¿CUÁL ES LA RESPUESTA DEL FETO A LA DISMINUCIÓN DE LOS NIVELES DE OXIGENACIÓN?

La respuesta fetal dependerá esencialmente de varios factores que podemos englobar en cuatro grupos no independientes sino, la mayoría de las veces, relacionados entre sí.

  • La gravedad de la hipoxemia.
  • La duración del episodio de hipoxia (puede durar  minutos o prolongarse durante semanas). Es importante tener en cuenta que varios episodios de corta duración, pero muy seguidos en el tiempo, pueden llegar a ocasionar un fallo en la capacidad de adaptación del bebé, como sucede frecuentemente en el parto.
  • El estado de oxigenación del bebé previo al episodio de hipoxia, es decir la capacidad de reserva respiratoriadisponible que pueda ser movilizada según las necesidades.
  • Edad de la gestación. Los bebés prematuros son más vulnerables que los bebés a término.

De acuerdo con estos principios, los médicos saben que el bebé va a responder de forma distinta a cada episodio de hipoxia neonatal.

SIGNOS Y SÍNTOMAS

Las manifestaciones clínicas del sistema nervioso central y el curso que tomen dependerán de la severidad de la hipoxia neonatal.

Hipoxia Leve

  • El tono muscular puede estar un poco aumentado y los reflejos pueden ser un poco enérgicos en los primeros días de vida.
  • Anormalidades de comportamiento transitorias como por ejemplo mala alimentación, irritabilidad y llanto excesivo o somnolencia (típicamente en patrones alternativos).
  • Todo esto se resuelve, típicamente, en 24 horas

Hipoxia moderada

  • El bebé está letárgico y somnoliento, con una significativa baja del tono muscular y reflejos disminuidos. El reflejo del Moro y el de succión pueden ser bajos o ausentes.
  • El bebé puede experimentar periodos ocasionales de apnea(suspensión de la respiración).
  • Las convulsiones se presentarían en las primeras 24 horas de vida.
  • Puede haber una recupareción total en las primeras 2 semanas y esto se asocia a un resultado mejor a largo plazo.

Hipoxia severa

  • Las convulsiones pueden retrasarse, son severas y resistentes al tratamiento convencional. Son generalizadas y su frecuencia puede incrementarse en las primeras 24 a 48 de su inicio relacionándose con la fase de daño por reperfusión del oxígeno.

Conforme avanza el daño cerebral, las convulsiones cesan y el electroencefalograma se hace isoeléctrico  (muestra un patrón de supresión de las ondas eléctricas cerebrales).

En ese momento, el bebé está cada vez menos alerta y la fontanela se hincha sugiriendo que hay edema cerebral.

Otros síntomas incluyen los siguientes:

  • El estupor o estado de coma es típico; el bebé no responde a los estímulos externos.
  • La respiración es irregular y es necesario darle apoyo ventilatorio externo.
  • Los reflejos están deprimidos al igual que el tono muscular.
  • Los reflejos neonatales: de agarre, el del Moro, tragar, están ausentes.
  • Puede haber perturbación del movimiento ocular como nistagmus y bizquera.
  • Las pupilas pueden estar dilatadas, fijas o casi sin reacción a la luz.
  • Puede haber irregularidades del ritmo cardiaco y de la respiración y el bebé muere por falla cardiorespiratoria.
  • Casi todos los recién nacidos asfixiados manifiestan convulsiones sutiles en forma de apneas, parpadeos, chupeteo y movimientos de la lengua; los recién nacidos a término manifiestan movimientos clónicos en un patrón aleatorio conocido como convulsiones clónicas multifocales.

¿CUÁL ES EL DAÑO A LOS TEJIDOS Y ÓRGANOS?

La asfixia fetal produce un compromiso en todos los sistemas del organismo del bebé, por lo tanto, los síntomas que presente el feto o el bebé dependerán del grado en que haya sido afectado cada órgano.

En algunos casos solo hay manifestaciones en un solo órgano. Los más afectados son el riñón, el SNC, el cardiovascular y el pulmón.

  • Sistema Nervioso Central: Es el órgano más vulnerable por su pobre capacidad de regeneración y las eventuales secuelas que pueden quedar. Las manifestaciones clínicas más características se han englobado bajo el término de Encefalopatía hipóxica isquémica
  • Sistema cardiovascular: A nivel cardíaco la asfixia causa daño transitorio en el miocardio (la capa interna muscular del corazón) y de ahí que se disminuye el número de contracciones.
    • El diagnóstico precoz y tratamiento de esta complicación determina la sobrevida inmediata del recién nacido asfixiado.
  • Sistema Respiratorio: El cuadro más frecuente es el Síndrome de Aspiración de meconio asociado con frecuencia a diverso grado de Hipertensión Pulmonar Persistente y hemorragia pulmonar.
  • Riñón y vías urinarias: La disminución de la circulación de la sangre en los riñones explican el compromiso renal que se observa en un gran porcentaje de los RN asfixiados. Clínicamente se puede observar disminución en la producción de orina (oliguria) e hipertensión arterial. La falta de tono muscular de las vías urinarias puede llevar a una parálisis de la vejiga.
    • La asfixia es probablemente la causa más frecuente de insuficiencia renal aguda en el período neonatal.
  • Sistema Digestivo:puede llegar a disminución de los movimientos del intestino y úlceras de stress. La isquemia intestinal (sufrimiento de las células del intestino por la falta de oxígeno) es uno de los factores predisponentes a la “enterocolitis necrosante” (inflamación que causa destrucción de cantidades variables de intestino).
  • Sistema hematológico e Hígado: Se observan cambios en los componentes de la sangre como consecuencia de la hipoxia y estrés de la médula de los huesos. El hígado está dañado y como consecuencia puede haber ictericia (color amarillento de la piel), hemorragia dentro del hígado y baja del nivel de glucosa en la sangre (hipoglucemia).

FASE DE REOXIGENACIÓN

Si los episodios de asfixia son breves, la re-oxigenación permite que se restablezca el metabolismo celular en casi todos los tejidos, incluyendo el sistema nervioso central.

La circulación se recupera con rapidez y ocurre un período de aumento de flujo sanguíneo; la frecuencia cardíaca se normaliza; el daño al cerebro se resuelve en unos 30 minutos y los ácidos del cuerpo se normalizan en las horas siguientes.

Si la hipoxia dura más de 30 minutos, algunas células no recuperan su función, desarrollándose posteriormente un infarto en esa región.

Tanto durante el periodo de hipoxia como en la fase de reoxigenación, puede producirse un daño neurológico irreversible o la muerte perinatal.

DIAGNÓSTICO

Evitar la hipoxia es un reto para todo el equipo médico perinatal, sin embargo aún no hay acuerdo de cuál es la mejor manera de diagnosticarla en útero ya que la mayoría de las pruebas diagnósticas no son 100% seguras.

DIAGNÓSTICO ANTES DEL PARTO

Estudios de imagen y laboratorio: La ciencia obstétrica ha establecido sistemas para monitorear el estado del bebé desde el embarazo y al inicio de la labor de parto para prevenir la asfixia fetal:

  • La ecografía o ultrasonido: para detectar a los fetos con retraso del crecimiento intrauterino, pero existendificultades en la utilización de esta técnica, ya que cuando se hace un solo estudio durante todo el embarazo,  no se puede verificar cambios en la velocidad de crecimiento.
  • Valoración del líquido amniótico: El diagnóstico de oligohidramnios (falta de líquido amniótico) es esencialmente por ultrasonido y se considera un signo de alarma por lo que, ante el diagnóstico del mismo, el médico estará obligado a poner en marcha otras actuaciones obstétricas.
  • Monitorización de la frecuencia cardíaca fetal: La auscultación debe efectuarse durante al menos 30 segundos después de una contracción. En pacientes de alto riesgo, el American College of Obstetricians and Ginecologist(ACOG) recomienda la valoración y registro de la frecuencia cardiaca fetal (FCF) cada 15 min, al menos durante la fase activa del parto. Es un método fácil de realizar, bien tolerado por laembarazada y que no requiere aparatos sofisticados.
  • Perfil biofísico fetal:Incluye la medición de los movimientos respiratorios y corporales, tono o fuerza de estos movimientos, volumen del líquido amniótico y la FCF. Aunque la frecuencia de los falsos positivos es del 30%, los resultados son mejores que con la valoración aislada de la FCF.
    • Un registro es anormal cuando la FCF basal es inferior a 110 latidos/minuto, hay ausencia de variabilidad, o aparecen “desaceleraciones” en cada una de las contracciones.
    • Cuando se detecte mediante auscultación una FCF indicativa de alarma y los signos anormales persistan, el médico seguramente considerará realizar una cesárea.
  • Estimulación vibro-acústica (EVA):Se basa en que el feto sano, a partir de las 28 semanas de gestación, responde con un movimiento brusco y una elevación de la FCF a la estimulación con ruido y vibración.
  • Doppler: El Doppleres una ecografía en color que permite evaluar el flujo sanguíneo en cualquier arteria o vena. Es de especial relevancia para el estudio del cordón umbilical, la circulación cerebral y cardíaca fetal, así como la circulación uterina. La información obtenida a través del Doppler nos aporta información muy útil relacionada con el crecimiento fetal.

DIAGNÓSTICO DURANTE EL PARTO

Monitorización electrónica contínua de la FCF durante el parto: La monitorización electrónica continua de la frecuencia cardiaca se introdujo a principio de los setenta.

Desgraciadamente, algunos estudios han puesto de manifiesto una mayor frecuencia de cesáreas y partos vaginales quirúrgicos debidos a diagnósticos erróneos de sufrimiento fetal en pacientes con monitorización electrónica continúa. Además no se ha demostrado su utilidad comparada con la medición de cada 15 minutos.

Electrocardiograma: la interpretación de los patrones de FCF en relación con las contracciones uterinas permite evaluar el estado fetal durante el parto lo que reduce la cifra de cesáreas por sufrimiento fetal en un 53%.

Cordocentesis, medición del equilibrio ácido-básico: La medición del equilibrio ácido base (EAB) es la piedra angular del diagnóstico de la hipoxia fetal que va a condicionar el tratamiento que el médico debe tomar para evitar el riesgo de daño neurológico

  • Monitorización continua del equilibrio ácido-base:La determinación de los valores del EAB durante el parto mediante microtomas de muestras de sangre, o en arteria umbilical en el recién nacido, permite obtener valores puntuales de un proceso que es dinámico.

Control Cardiotocográfico: Registra simultáneamente la actividad cardiaca del bebé y la actividad uterina –contracciones- incluyendo los movimientos fetales. Las contracciones pueden disminuir el flujo sanguíneo a la placenta y, por lo tanto, la oxigenación fetal.

El feto que ya tiene hipoxia, tolera mal estas circunstancias y puede experimentar problemas en el corazón y disminución del gasto cardiaco.

  • Seguramente el médico hará un registro cardiotocográfico de corta duración en el momento en el que se inicia el trabajo de parto en las embarazadas consideradas de alto riesgo.

Observación de la presencia de meconio en el líquido amniótico: En el pasado la presencia de meconio en el líquido amniótico se consideraba un signo de hipoxia fetal.

Sin embargo, actualmente se considera que el meconio es un hallazgo inespecífico que puede guardar relación con una gran variedad de problemas además de la asfixia. Por ejemplo, las malformaciones cardiovasculares (13.9%) la isoinmunización Rh, la corioamniotis (37.7%) y la preeclampsia (11.1%).

El valor predictivo del meconio como indicador de asfixia fetal es algo mayor cuando se da en embarazos de alto riesgo y cuando es de color verde oscuro o negro, espeso y pegajoso. El meconio ligeramente coloreado, de tonalidad amarilla o verdosa, guarda escasa relación con la hipoxia fetal.

DIAGNÓSTICO DESPUÉS DEL PARTO/ DIAGNÓSTICO CLÍNICO

El recién nacido muestra disminución del tono muscular y dificultad para iniciar espontáneamente las respiraciones. Si el bebé no inicia rápidamente su respiración existirá una privación en el aporte de oxigeno que lo llevará a un estado de hipoxia con acumulación de toxinas, acidosis progresiva y signos neurológicos anormales.

Índice de APGAR: el puntaje de Apgar será bajo y continuará así si el bebé no respira normalmente a los 5 minutos.

Espectometría casi infrarroja: Esta técnica no invasiva, permite medir el volumen sanguíneo en el cerebro, los niveles de hemoglobina oxigenada y desoxigenada, así como las reacciones ante cambios en la presión del dióxido de carbono arterial.

Los estudios preliminares realizados en recién nacidos a término con asfixia perinatal demuestran que el procedimiento resulta eficaz para conocer los cambios que ocurren durante la fase de reoxigenación y los resultados tienen valor pronóstico.

Medición de gases en la muestra de sangre del cordón umbilical: Los gases (oxígeno y CO2) de la vena y arteria umbilicales suelen medirse en el momento del parto para determinar la situación del metabolismo ácido-básico del recién nacido en el momento de nacer.

Este estudio se hace cuando el médico ha observado cualquier anomalía importante en el proceso del parto o cuando persisten los problemas en la situación del neonato más allá de los primeros 5 minutos de vida.

TRATAMIENTO

La asfixia neonatal es una condición compleja que puede ser difícil de predecir o prevenir. El tratamiento inmediato es importante para minimizar los efectos de la falta de oxígeno en el bebé.

El tratamiento específico para la asfixia neonatal está basado en:

  • La edad gestacional del bebé, su salud en general y su historia médica.
  • La severidad de la asfixia.
  • La tolerancia del bebé a ciertos medicamentos, procedimientos o terapias.

TRATAMIENTO DURANTE EL EMBARAZO

Son muy pocas las ocasiones en las que, ante un diagnóstico de hipoxia fetal durante el embarazo, el médico pueda realizar un tratamiento eficaz del mismo.

La actitud de tu médico puede ser activa determinando, si la gravedad del caso lo permite, el momento más adecuado para finalizar el embarazo, o conservadora  permitiendo que el embarazo continúe teniendo en cuenta que no se ha demostrado que ninguna de las medidas que se han propuesto hasta el momento para mejorar la falta de oxigenación del bebé resulte eficaz.

Medidas conservadoras:

  • Reposo en cama
  • Terapia farmacológica (con medicamentos que el médico considera que puedan ayudar a resolver el problema).
  • Administración de oxígeno.
  • Otras

TRATAMIENTO ANTE LA HIPOXIA FETAL DURANTE EL PARTO

Medidas generales: El tratamiento más frecuente ante una situación de hipoxia fetal durante el parto es extraer al feto por cesárea.

Sin embargo, no debe olvidarse que existen algunas medidas conservadoras que contribuyen a mejorar el estado fetal. Por ejemplo, los cambios de posición materna, para evitar la compresión de la arteria aorta o para descomprimir el cordón, la regularización de la dinámica de la labor de parto interrumpiendo la administración de oxitocina; el médico puede también proporcionar a la madre una analgesia eficaz (bloqueo epidural) o puede también corregir posibles acidosis maternas, etc.

El  tratamiento puede incluir:

  • Darle a la madre oxígeno extra desde antes del parto.
  • Parto de emergencia por cesárea.
  • Ventilación asistida y medicamentos para apoyar la respiración del bebé y su presión sanguínea.

Tratamiento después del parto

Después de estabilizar al bebé y de hacer las medidas necesarias para que se inicie y regularice la respiración, el bebé será trasladado de inmediato a la Unidad de Cuidados Intensivos donde:

Si el bebé al nacer presenta una asfixia leve, el Neonatólogo, con una manipulación mínima y cuidadosa, tomará una serie de medidas generales como colocarlo en la posición adecuada, regular la temperatura, iniciar el control estricto de líquidos (sueros, orina y pérdidas insensibles) y realizarle una serie de análisis de laboratorio para controlar los gases, la acidosis metabólica, etc.

Y según vea la evolución del bebé y las complicaciones que se vayan presentando, pedirá otros estudios más especializados.

Es importante mantener una oxigenación y ventilación adecuada tratando de evitar: flexión o hiperextensión del cuello, el llanto, los procedimientos dolorosos, el ruido excesivo, una temperatura no controlada, las convulsiones, periodos de apnea (suspensión de la respiración no voluntaria), etc.

Si el bebé presenta una asfixia más seria, es probable que necesite

  • Una máquina respiratoria (ventilación mecánica)
  • Terapia respiratoria
  • Fluídos intravenosos.
  • Medicamentos para controlar la presión arterial.
  • Medicamentos para prevenir las convulsiones.
  • Nutrición por vía intravenosa para darle tiempo al intestino de recuperarse.

NUEVOS TRATAMIENTOS

El abanico de posibilidades preventivas de daño neurológico ante la hipoxia perinatal es cada vez más amplio gracias a los importantes avances que se han producido recientemente en el conocimiento del funcionamiento del cerebro.

  • Ventilación de Alta Frecuencia: se utiliza una máquina que envía bocanadas rápidas de aire a los pulmones del bebé. Es más gentil que la máquina respiratoria común la cual, en algunas ocasiones, utiliza alta presión que puede llegar a dañar los pulmones frágiles del recién nacido.
  • Inhalación de óxido nítrico: Se utiliza cuando el bebé tiene falla respiratoria o alta presión en los pulmones (hipertensión pulmonar). El bebé recibe el óxido nítrico a traves de un tubo que se inserta en la vía aéres. Esto ayuda a abrir (dilatar) los vasos sanguíneos de los pulmones de tal manera que se puede llevar la sangre oxigenada a todo el cuerpo.
  • Hipotermia: Las investigaciones muestran que al disminuir la temperatura interna del bebé hasta 33.5 grados durante 72 horas, se puede proteger al cerebro del daño durante la segunda etapa de la asfixia. Esta etapa (reperfusión) es cuando se logra restaurar el flujo sanguíneo y de oxígeno hacia el cerebro. Este tratamiento trabaja mejor cuando se inicia en las primeras 6 horas de vida. Se utiliza únicamente cuando el bebé tiene un mínimo de 36 semanas de gestación (no antes).
  • Soporte vital extracorpóreo neonatal: La oxigenación con membrana extracorpórea (ECMO) es una terapia que utiliza un “bypass””cardiopulmonar parcial modificado para dar soporte pulmonar y/o cardíaco por un tiempo prolongado, generalmente de 1 a 4 semanas. Extracorpórea significa “fuera del cuerpo”. La sangre mal oxigenada se pasa a una máquina que quita el bióxido de carbono y agrega oxígeno para después retornarla al cuerpo del bebé. La ECMO da “tiempo” para el descanso pulmonar y/o cardíaco, y así da oportunidad a la recuperación. El candidato a ECMO ideal es el que tiene una alta predicción de mortalidad, pero con una injuria pulmonar o cardiovascular potencialmente reversible.

TRATAMIENTO DE SEGUIMIENTO:

Debe hacerse seguimiento contínuo cuando menos hasta la edad escolar. Debe hacerse hincapié en el registro de la circunferencia cefálica pues el crecimiento del cráneo está directamente relacionado con el pronóstico.

Los bebés prematuros o los que sufrieron asfixia o anoxia, pueden tener un daño permanente. Esto puede afectar su cerebro, corazón, pulmones, riñones, intestino y otros órganos. Los prematuros o recién nacidos con asfixia pueden presentar:

  • Parálisis cerebral.
  • Retraso en el desarrollo.
  • Trastorno de Déficit de Atención / Hiperactividad.
  • Problemas en la visión.

Al terminar el tratamiento de urgencia, el bebé necesitará un cuidado especial contínuo para lograr un desarrollo lo más óptimo posible. Es necesario que la familia trabaje en conjunto con el equipo médico tratante para crear un plan que sea el mejor para el bebé y para la familia.

PRONÓSTICO

Existen una serie de marcadores de mal pronóstico neurológico en la asfixia perinatal con encefalopatía hipóxico–isquémica (problemas cerebrales causados por la falta de oxígeno).

Algunos de estos marcadores se obtienen de la valoración en los momentos inmediatamente siguientes al parto y otros se aprecian en una evaluación postnatal: exploración neurológica, pruebas bioquímicas, estudios neurofisiológicos (electromiografía que sirve para evaluar el estado de los nervios y músculos), estudios neuro-radiológicos (como la tomografía o resonancia magnética), etc.

¿DE QUÉ MANERA SE PUEDE PREVENIR LA ASFIXIA NEONATAL?

Mediante controles desde antes del embarazo y del embarazo, que detecten y traten oportunamente las enfermedades y problemas de la madre que puedan afectar al feto; a través de una monitorización del bienestar fetal y una buena atención de parto, con actitud de previsión y con personal entrenado por programas calificados de resucitación neonatal.

El factor más importante para prevenir el resultado perinatal deficiente es la asistencia prenatal precoz y de calidad. El médico debe prestar una atención escrupulosa a los antecedentes reproductivos y a la situación médica de cada embarazada.

REFERENCIAS

 

Incompetencia istmico cervical: cuello incompetente
Complicaciones, Embarazo, Otras

Insuficiencia (incompetencia) del cuello uterino

¿Qué es el cuello uterino?

El cuello uterino o cérvix es el extremo inferior del útero, que se extiende hacia la vagina en forma de tubo o canal. (La palabra cérvix significa “cuello” en latín.)

En una mujer que no ha tenido hijos, el cuello es bastante estrecho con una pequeña abertura que permite la salida de la menstruación. Generalmente mide de 2 a 2.5 cm de largo.

                                                                 

Cuando no estás embarazada, el canal cervical permanece un poquito abierto para dejar que el esperma ingrese al útero y que la sangre de la menstruación fluya hacia el exterior. Una vez que quedas embarazada, el cuello uterino se llena de secreciones que forman una barrera protectora llamada tapón mucoso.

Durante un embarazo normal, el cuello del útero permanece firme, alargado y cerrado hasta finales del tercer trimestre. Cuando el peso del bebé y del líquido amniótico es cada vez mayor, el cuello del útero comienza a ablandarse, borrarse (hacerse más corto) y dilatarse (abrirse) a medida que tu cuerpo se prepara para el parto.

¿Qué significa insuficiencia del cuello uterino?

La insuficiencia del cuello uterino se refiere a un cuello uterino que se abre en forma prematura, antes de que el bebé haya llegado a término. Esta condición también se conoce como cuello uterino incompetente o incompetencia cervical.

 El cuello uterino no es capaz de retener un embarazo (que hasta ese momento iba perfectamente) y se “abre” en el segundo trimestre en ausencia de contracciones, labor de parto o ambas (Colegio Americano de Obstetras y Ginecólogos: ACOG) originando un aborto espontáneo o un parto prematuro.

Esto podría suceder en el segundo trimestre o a comienzos del tercero -cuando tu cuello del útero está más blando y débil de lo habitual o anormalmente corto desde un principio- a medida que el peso en aumento de tu bebé ejerza cada vez más presión sobre él. Como ya lo mencionamos, por lo regular no se producen contracciones u otros síntomas.

Se considera como una complicación del embarazo aun cuando el problema casi siempre está presente antes de que la mamá se embarace. Alrededor del 25% de los abortos espontáneos después de las 16 semanas de embarazo son atribuidos a una incompetencia del cuello uterino.

Esta complicación puede ser causa de las siguientes complicaciones:

  • Un aborto espontáneo durante el segundo trimestre.
  • Una ruptura prematura temprana de las membranas, en la cual la bolsa de las aguas se rompe antes de que el embarazo llegue totalmente a término y antes de que empiece el parto.
  • En parto prematuro (antes de la semana 37). Esta complicación aumenta especialmente los riesgos de parto prematuro temprano, que es cuando el bebé nace antes de la semana 32.

¿Cuál es la causa?

Nadie sabe con seguridad cuál es la causa el cuello uterino incompetente. Sin embargo, los investigadores aceptan que hay algunas situaciones de riesgo:

  • Si te hicieron alguna operación o procedimiento quirúrgico que haya involucrado al cuello del útero.
  • Desarrollo anormal del cuello uterino, que puede presentarse en hijas de madres que estuvieron expuestas a la droga DES durante el embarazo (dietilestilbestrol – Hormona sintética de estrógeno que en una época se recetaba a mujeres embarazadas para prevenir abortos. Este medicamento ya no se receta a mujeres embarazadas.
    • Las anomalías congénitas incluyen también los padecimientos cóngénitos que afectan el colágeno (como por ejemplo el Síndrome de Ehlers Danlos).
  • Daños causados al cuello durante un parto previo traumático en el cual el cuello se desgarra (el trauma del cuello uterino puede ocurrir durante la labor de parto o en el parto con el uso fórceps, aspiradora o cesárea)
    • o durante un procedimiento de dilatación y legrado
    • o te han interrumpido varios embarazos.
  • Tu cuello uterino es más corto de lo normal. Aparentemente, la longitud del cuello uterino es un factor importante. Cuanto más corto es el cuello uterino, más probabilidades tiene la mujer de tener insuficiencia del cuello uterino.

                                                                      cuello uterino

  • Desarrollaste insuficiencia cervical en embarazos anteriores.

Síntomas

Si tienes un cuello incompetente puede ser que no tengas ningún síntoma mientras que tu cuello uterino se empieza a abrir al principio del embarazo. Puede ser que tengas un ligero malestar que te haga sentir “incómoda” o que tengas ligero manchado de sangre en al curso de una o varias semanas. Sin embargo, al iniciar la semana 14 a la 20, tienes que observar si presentas:

  • Una sensación de presión en la pelvis.
  • Dolor de espalda baja.
  • Cólicos ligeros.
  • Un cambio en el flujo vaginal.
  • Un sangrado vaginal ligero.

La mayoría de las mujeres que tienen cuello incompetente perderán a su bebé entre la semana 16 y la semana 22 del embarazo aunque esto puede suceder aún más tarde.

Generalmente hay dos tipos de sintomatología:

Dilatación indolora del cuello y salida lenta del líquido amniótico (como un escurrimiento continuo).

Dilatación indolora lenta del cuello que permite que la bolsa (o las membranas) se salgan a través de la vagina dando una sensación de “bulto”. La mayoría de los ginecólogos ya no intervienen en este punto ya que el riesgo de romper la bolsa es muy grande.

Se sabe también que no es posible “regresarla” al útero ya que la acidez de la vagina “ataca” a la membrana y la debilita por lo que podría infectarse. De hecho, es la acidez de la vagina lo que hace que se rompan las membranas en un parto a término.

En la mayoría de los casos, la embarazada no se da cuenta de lo que está pasando.

Si tienes antecedentes de abortos en el segundo trimestre del embarazo u otros indicadores de cuello incompetente (tal como ser hija “DES”), debes consultar al médico acerca de la salud de tu cuello uterino.

Detección temprana y diagnóstico

Los investigadores médicos no han encontrado aún un método eficaz para la detección temprana y rutinaria de la insuficiencia del cuello uterino en las mujeres.

La incompetencia del cuello uterino no es un problema que los médicos chequen rutinariamente sino hasta que una mujer tiene una historia de haber sufrido la pérdida de uno o dos embarazos en el segundo o en el tercer trimestre asociados a una dilatación del cuello uterino relativamente indolora y se han descartado otras causas (infección, sangrado de la placenta, embarazo múltiple y labor de parto prematura).

De hecho, no existe ninguna prueba o estudio que sirva para hacer un diagnóstico de la insuficiencia del cuello uterino–ni excluirlo- en una mujer en su primer embarazo. Sin embargo, un diagnóstico temprano en estas mujeres permite un tratamiento inmediato y un pronóstico más favorable.

Cuando la historia clínica corrobora la sospecha médica, seguramente el médico sugerirá hacer un ultrasonido para examinar el espesor y tamaño del tejido del cuello uterino. El estudio puede realizarse cuando se esté planificando un nuevo embarazo o en las etapas tempranas del mismo.

Esto puede ayudar a predecir si corre riesgo de tener un parto prematuro pero no es un diagnóstico por sí mismo.

Cuando la dilatación está ya avanzada, el médico podrá hacer el diagnóstico simplemente con el examen físico.

Tratamiento

El objetivo de todo embarazo es que el bebé llegue sano hasta el final (37-40 semanas). Los abortos en el primer trimestre, generalmente, suceden por anormalidades cromosómicas en el bebé.

Algunas de las pérdidas en el segundo o tercer trimestre son a causa de un cuello uterino incompetente pero la mayoría son a causa de otras complicaciones como inflamación de la decidua, hemorragia o sobredistención del útero.

Cuando se trata de cuello incompetente, en algunos casos, el médico puede ayudar a impedir la pérdida del embarazo realizando dos tipos de tratamientos que son complementarios uno del otro:

Tratamiento quirúrgico por medio de un cerclaje

Para hacer un cerclaje cervical el médico coloca una sutura de material especial alrededor de la parte alta del cuello y después anuda (como una bolsa) para cerrarlo. El procedimiento puede hacerse –de preferencia con anestesia regional- por vía vaginal o por una incisión abdominal. Esta última se utiliza únicamente cuando se piensa que podría fallar la vía vaginal (porque el cuello esté demasiado corto)

                                                            cuello uterino2

Esta sutura está supuesta a mantener el cuello cerrado hasta que se quite en el momento del parto. Sin embargo, hay mucha controversia acerca de si el cerclaje debería utilizarse en esta situación.

Algunas investigaciones recientes cuestionan la eficacia del procedimiento en lo que respecta a prevenir abortos espontáneos, rupturas prematuras tempranas de las membranas o partos prematuros, salvo en un número pequeño de circunstancias.

Y el procedimiento en sí puede ocasionar problemas que desencadenen un parto prematuro, entre ellos, infección uterina, ruptura de membranas e “irritación” uterina que deriven en contracciones y aborto espontáneo.

Los especialistas están intentando averiguar si, en determinadas situaciones, los beneficios del cerclaje superan a los riesgos. Las mujeres que parecen beneficiarse del cerclaje incluyen aquellas que han sufrido dos o más pérdidas en el segundo trimestre o nacimientos prematuros por causa desconocida.

Si te encuentras en ese grupo, es probable que te hagan un cerclaje entre las semanas 12 y 14, antes de que tu cuello uterino comience a cambiar. Para fijar la fecha el médico tomará en cuenta la edad gestacional de tus pérdidas anteriores teniendo en cuenta que cada vez se presentan antes.

Parece ser que si el cerclaje se practica durante esas semanas es menos arriesgado que si se realiza en etapas más avanzadas del embarazo, cuando el cuello ya ha comenzado a cambiar. Muy raramente se realiza en la semana 24.

Si te practican este procedimiento, te podrás ir a tu casa ese mismo día o el siguiente. Te dirán que te relajes durante algunos días, durante los cuales posiblemente tengas una ligera hemorragia o algunos dolores de tipo menstrual. Será necesario que te abstengas de tener relaciones sexuales durante un tiempo (o posiblemente durante el resto del embarazo).

El médico continuará revisando tu cuello uterino periódicamente para controlar que no haya signos de más cambios hasta que te retiren los puntos, generalmente a la semana 37. Llegado ese momento, te podrás relajar y esperar a que comience el parto.

Algunos médicos solían recomendar reposo en cama además de (o en lugar de) practicarte un cerclaje. Sin embargo, no hay pruebas de que el reposo en cama previene el parto prematuro o parto e incluso puede tener efectos negativos. En lugar de eso, te podrían pedir que hagas lo siguientes:

  • Reducir tu nivel de actividad.
  • No hacer ejercicio.
  • Evitar tener relaciones sexuales.
  • Hacer descansos frecuentes cuando camines.

Si estás experimentando signos de parto prematuro, y un ultrasonido muestra que tu cuello uterino es corto y tu bebé tiene posibilidades de sobrevivir (lo que por lo general sucede después de las 24 semanas de gestación), tu doctor podría prescribirte esteroides.

Al combinarse con otros medicamentos, los esteroides pueden prevenir el parto prematuro. También ayudan a que los pulmones de tu bebé se desarrollen más rápidamente, lo que le ayudará a tu bebé si nace prematuramente.

Requisitos para el cerclaje: Para el médico es esencial confirmar la viabilidad del feto por medio de un ultrasonido y, al mismo tiempo, descartar malformaciones importantes; te pedirá también que te hagas un análisis general de orina y de flujo vaginal para descartar posibles infecciones que deberán ser previamente tratadas.

Remoción del cerclaje: generalmente se retira en la semana 36 a 38 del embarazo y puede hacerse sin anestesia o con una ligera sedación.

Tratamiento médico

Después de que a una mujer se le ha practicado un cerclaje, se le indican medicamentos para evitar un aborto e infecciones a causa de la cirugía.

Las visitas al médico serán más frecuentes ya que es necesario monitorear muy cercanamente el estado del cuello, cualquier cambio significa que la embarazada tendrá que estar en reposo absoluto en cama hasta el término de su embarazo.

Es importante que el cerclaje se quite antes de que empiece la labor de parto para que el cuello no se traumatice durante las contracciones haciendo que las costuras desgarren el cuello uterino.

Una vez que se retira la sutura, el trabajo de parto se iniciará muy rápido y el bebé podrá nacer sin problemas ya que en este momento se considera que ya está totalmente desarrollado.

Existe el llamado cerclaje de emergencia que se coloca en el momento en que se detecta la apertura del cuello entre las 16 y 24 semanas de gestación. Los médicos consideran este tipo de cerclaje si no existen signos infección (corioamnioitis) o signos de labor de parto.

Preguntas frecuentes

P:¿El cuello incompetente afectará mi próximo embarazo?

R: Sí. Por lo general, una mujer que tiene esta condición deberá tomar precauciones en embarazos subsiguientes.

Referencias

Embarazo

¿Otro bebé?

La decisión de tratar de volver a embarazarte, puede ser difícil. Quizás sea lo último que tengas en tu pensamiento o…puede ser un deseo que te impide pensar en otra cosa y deseas embarazarte de inmediato.

Es natural, quieren llenar el vacío de su corazón. Sin embargo, es posible que tengan miedo de que todo se repita y te preguntas: ¿si tuviste un bebé muerto durante el embarazo, puedes tener un bebé saludable en el siguiente embarazo?

Definitivamente SÍ. Las posibilidades de tener un segundo bebé muerto durante el embarazo son mínimas para la mayoría de las mujeres (menos del 1%).

Para muchos padres, el pensamiento de tener otro bebé es algo que les da esperanza, sin embargo, otros sienten que, de alguna manera, están traicionando al bebé muerto. El momento adecuado dependerá de sus circunstancias individuales. Confíen en ustedes.

Cuando un bebé muere, muchas personas bien intencionadas tratan de persuadir a los padres de que tener otro bebé tan pronto como puedan es la única respuesta para aceptar la muerte y tratan de convencerlos de que la aceptación y paz solamente llegará por este medio. Pero, en realidad, la paz y el consuelo llegan cuando logras incorporar un evento en tu vida de una forma en la que te permite vivir no olvidando pero sin amargura ni dolor. Hacer esto toma tiempo y no necesariamente se va a acelerar por tener o no tener otro bebé.

La decisión de NO tener otro bebé: Si deciden no tener otro bebé y esa decisión la tomaron ustedes sopesando sus razones, tengan la seguridad de que esa decisión es la correcta. Pero si la tomaron basándose más en el miedo que en consideraciones prácticas, no duden, acudan a recibir algún asesoramiento. No son ni la primera ni la última pareja en tener este sentimiento.

Cuando hayan decidido que ya están listos para otro embarazo, asegúrense de, primero que nada, hablar con el médico. El o ella confirmarán que ya estás lista física y emocionalmente para otro embarazo.

Si no se ha encontrado ninguna explicación para la muerte del bebé, puede ser reconfortante saber que no hay ninguna razón para que este evento se repita.

Si se descubre la causa, entonces tu médico trabajará contigo para reducir el riesgo de que se repita. Esto es el caso cuando hubo problemas con la placenta o con el crecimiento del bebé.

En caso de que el bebé haya muerto por algún problema genético, el Consejero Genético te ayudará a entender cuáles son tus probabilidades en este nuevo embarazo. El Consejero Genético es el médico especialista en genética que te ayudará a entender qué son los genes y cómo algunos problemas médicos se heredan en las familias y cómo pueden afectar tu salud y la salud de tu bebé.

Y seguramente, cuando confirmes que estás embarazada estarás nerviosa, excitada y al mismo tiempo asustada. Es difícil ser paciente y sientes que no es justo volver a pasar por todo esto una vez más; el embarazo te parece eterno y dudas de que no se vuelva a repetir la muerte del bebé.

Es importante que vayas construyendo un sistema de apoyo y esperanza, pregunta a otros padres que hayan tenido una pérdida y un subsecuente embarazo. Busca en el grupo de personas que te rodean, a las que sepan escuchar tus miedos y no te llenen de consejos que no pediste.

Revisar una vez más las causas de la muerte del bebé durante el embarazo y reducir los riesgos puede darte más confianza. El momento más difícil será cuando llegues a la fecha en la que tu bebé murió. Este es uno de los hitos a los que tienes que llegar y pasar. Después de esto, muchos padres reportan que sus momentos de intranquilidad  empiezan a disminuir.

Calma, no son los únicos que han experimentado este malestar o pánico. Casi todos pasan por ahí. Y lo único que pueden hacer es encontrar la mejor forma para manejar estos sentimientos. Si este nerviosismo surge contínuamente, busquen  ayuda.

¿PUEDO HACER ALGO PARA DISMINUIR EL RIESGO DE TENER OTRO BEBÉ MUERTO DURANTE EL EMBARAZO?

Estas son algunas de las cosas que puedes hacer:

  • Saca cita con el ginecólogo ANTES del embarazo para asegurarte de que tu salud está en óptimas condiciones.
  • Mantén el peso adecuado para tu edad y estatura antes del embarazo.
  • No fumes, uses mariguana o cualquiera de las otras drogas ilegales.
  • Si llegas a presentar cualquier dolor o sangrado vaginal, llama a tu médico de inmediato.

EL “EMBARAZO SUBSECUENTE”

En este embarazo tu médico te vigilará muy cercanamente y a las 32 semanas te pedirá que lleves la cuenta de las pataditas del bebé. De esta manera llevarás un record de cada cuándo se mueve. Igualmente, en cada visita hará pruebas para vigilar el latido del corazón del bebé y sus movimientos.

Este bebé es, en verdad, muy especial para ustedes y para todos en su alrededor. Tanto el embarazo como el nacimiento es una experiencia emocional avasalladora.

Cuando veas por primera vez y cargues a ese bebé, te llenarás de memorias difíciles que se van mezclando con el placer que estás sintiendo. Este momento puede ser una mezcla de gran felicidad y dolor intenso.

Son muchos los padres que han vivido este momento y comentan que, aunque no fue siempre fácil y tuvieron que trabajar mucho en el control de sus emociones, su esfuerzo fue premiado por uno de los más maravillosos periodos de sus vidas.

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Embarazo

¿los padres deben cargar y abrazar a su bebé muerto??

La respuesta es diferente para cada pareja. Algunos padres encuentran que cargar a su bebé es esencial para soportar la pérdida, mientras que otros, ni siquiera quieren verlo.

Las investigaciones muestran que ninguna de estas dos posibilidades es mejor que la otra y que la decisión está en los padres. La parte más difícil está en los padres indecisos que están confusos en su preferencia y que no se deciden sino hasta que ya es muy tarde. Algunos que no sostuvieron al bebé, terminan por arrepentirse.

Muchos padres encuentran consuelo en guardar alguna cosa del bebé y generalmente se les permite la opción de tomar fotos, o un mechón de pelo. En las muertes en útero, al contrario de los abortos, existe la opción de llevar a cabo un funeral formal y/o cremación.

¿CÓMO SE MANEJA EMOCIONALMENTE LA PÉRDIDA?

Si pasaste por una muerte en útero, seguramente ya sabes que es un golpe devastador difícil de superar. Es posible tener una amplia gama de emociones, algunas veces más de una a la vez: culpa, dolor, negación, enojo, tristeza, depresión, miedo, frustración, aceptación, paz, felicidad y alegría. La suma es posible y todos tus sentimientos son válidos. Sé tolerante con tu pareja ya que cada persona tiene su propio tiempo para procesar el dolor.

Es importante recordar que el dolor y la pena toman tiempo para superarse. Tengan paciencia. Trata de vivir cada momento, cada hora y cada día. Aunque nunca podrás “terminar” con el dolor, puedes aprender a vivir con esta pérdida. La recuperación es un proceso contínuo, no sucede de un día para otro…pero llega.

Cuida tu salud física: Para las mamás, a la pena se suma el que, además, están teniendo que sufrir con la bajada de la leche, las pérdidas vaginales y la depresión post parto que se agregan a su propio dolor.

Probablemente el médico te prescribirá algún medicamento para detener la producción de leche. Sin embargo, si tuviste preclampsia no será posible que te den el medicamento pero te ayudarán a que te sientas menos incómoda.

Es importante que te cuides, descansa y trata de mantenerte bien físicamente para que puedas continuar tu curación emocional.

Exprésate libremente: habla acerca de tu bebé, de tus sentimientos, de tu dolor. Haz algún proyecto que tenga sentido para ti. Todo esto te ayudará a evitar que la pena se incremente como cuando te guardas todo “embotellado”.

Busca a las personas que te puedan ayudar: Es normal pasar por una etapa de duelo que el tiempo y la comprensión y solidaridad de familiares y amigos les ayudará a resolver.

A medida que van superando la pérdida, pueden experimentar muchas emociones como atontamiento y negación, dolor profundo, enojo y depresión. Una mujer y su pareja pueden tener sentimientos diferentes y esto a veces crea tensión entre ellos cuando más se necesitan.

Habrá momentos en los que sea difícil confortarse mutuamente, pero abrirse a sus necesidades y encontrar otras personas que te ayuden en estos momentos, puede ser útil.

Puede resultar útil solicitar al médico que los refiera a un especialista que tenga experiencia en la asistencia a parejas que han perdido bebés.

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¿Cuáles son los síntomas tempranos de una muerte fetal?

Como ya lo mencionamos, la muerte del bebé en el útero durante el embarazo puede ocurrir sin ninguna señal previa de aviso, pero una de las cosas que acostumbran a hacer los médicos es instruir a la embarazada para que se acostumbre a contar las patadas del bebé a partir aproximadamente de la semana 26 del embarazo.

Si el bebé da menos de 10 pataditas por día o si la madre siente que se mueve menos que lo habitual, es probable que su doctor recomiende la realización de pruebas para comprobar el bienestar del feto (como el monitoreo de los latidos del corazón del bebé o una prueba de ultrasonido).

Si las pruebas demuestran que el feto tiene algún problema, a menudo es posible tomar medidas para prevenir su fallecimiento.

Otros posibles síntomas de aviso incluyen el dolor abdominal o de la espalda baja y el sangrado vaginal. Siempre es preferible pasarte al lado del exceso de precauciones y llama a tu médico si estás preocupada.

Todos estos cuidados y recomendaciones se deben realizar en todos los embarazos, pero con mayor razón cuando ya ha existido un evento previo de esta naturaleza.

¿QUÉ PASA DESPUÉS DE QUE EL BEBÉ MUERE EN EL ÚTERO?

Si el bebé ha muerto en el útero, tu médico hablará contigo acerca de las opciones que existen para que el bebé nazca. Cuándo y cómo dependerá de qué tan adelantada estés en el embarazo, tu historia médica y lo que tú creas que es mejor para ti y para tu familia.

Algunas mujeres necesitarán, por razones médicas, que el bebé nazca de inmediato, pero habitualmente es seguro esperar hasta que tú misma entres en la labor de parto. Esto acontece, por lo general, alrededor de las dos semanas después de la muerte del bebé.

El médico te puede recomendar:

  • Inducción del parto. Esto es cuando el médico te da algún medicamento o rompe la bolsa para obligar a que la labor de parto se inicie. Son muchas las que optan por este método inmediatamente después de que han recibido la noticia de la muerte de su bebé. Igualmente, si la labor de parto no se inicia a las dos semanas, el médico se verá obligado a inducir el parto porque existe la probabilidad de que desarrolles coágulos después de este tiempo.
  • Dilatación y evacuación: Durante este procedimiento quirúrgico, el médico dilata el cuello uterino para poder extraer al bebé. Esto puede limitar la información que se puede obtener de los estudios posteriores al bebé.
  • Operación cesárea: Esto es un procedimiento quirúrgico en el cual el cirujano hace un corte en el abdomen y útero para que nazca el bebé. Idealmente, este procedimiento debería evitarse.

Si estás esperando más de un bebé y se descubre la muerte de uno de ellos, el médico te aconsejará que no te induzcan el parto. Mucho de lo que se haga dependerá de si los bebés compartían placenta y en qué momento te encuentras del embarazo.

Es probable que el médico te aconseje darles más tiempo a los otros bebés a que sigan su maduración dentro del útero. Nacerán entonces al mismo tiempo en el momento más oportuno para los otros.

¿CÓMO SE DIAGNOSTICA LA MUERTE DEL BEBÉ?

Se puede confirmar mediante un examen con ultrasonido al no detectar latido del corazón. Este estudio también puede aprovecharse para volverse a estudiar la placenta y los órganos y estructuras del bebé para determinar alguna posible causa de la pérdida

¿QUÉ PRUEBAS DE LABORATORIO O ESTUDIOS SE PUEDEN HACER DESPUÉS DE LA MUERTE DEL BEBÉ?

Para los padres es muy importante comprender qué causó este desenlace y les puede ayudar a la pareja a superar su devastadora situación. Cuando se llega a conocer la causa de un nacimiento sin vida, los médicos pueden ofrecer mejores consejos a la pareja acerca del riesgo de que ocurra otro evento similar en un futuro embarazo y cuáles serían las estrategias para prevenirlo.

El médico revisará nuevamente al bebé, la placenta y el cordón umbilical para tratar de encontrar la causa de la muerte y pedirá permiso a los padres para hacer pruebas directamente al bebé que pudieran detectar cuál fue la causa de la muerte. En estas pruebas se puede incluir:

  • Para esta prueba toma un poco del líquido (amnio) que rodeaba al bebé en el útero. Cuando se sospecha que la causa fue una infección o un problema genético (heredable a través de los genes), puede recomendar este estudio que se realiza antes del nacimiento.
  • Este es un examen físico que se realiza en el cuerpo humano después de la muerte. En la autopsia se buscará identificar la causa o causas de la muerte, dará datos del desarrollo del bebé y proveerá información acerca de problemas de salud que podrían servir para el cuidado de la madre en un siguiente embarazo.
  • Pruebas genéticas -buscando problemas genéticos- en el bebé.
  • Estudios para detectar infecciones en el bebé o en la placenta.

Además de todo esto, el médico revisará tu historia familiar y cualquier problema o enfermedad que hayas tenido durante el embarazo.

Si es necesario te harán estudios de laboratorio en sangre para checar si no tienes alguna infección, problema genético o enfermedad crónica como el lupus o problemas de tiroides.

Con los resultados obtenidos el médico sabrá si existe la posibilidad de que se repitiera este evento si te volvieras a embarazar. Y aun cuando no se encontrara la causa, todos estos estudios te ayudarán a entender y sobreponerte a la muerte de tu bebé. Si tienes dudas, preguntale al médico cuál es el objetivo que busca y el costo.

¿QUÉ PASA CUANDO EL BEBÉ MUERE EN EL MOMENTO DEL PARTO?

Es muy raro que el bebé muera en la labor de parto o en el parto. Cuando algo no está bien, es una experiencia traumática para los padres quienes no entienden lo que pasa mientras ven al personal muy ocupado resolviendo la emergencia.

Más tarde se descubrirá que el bebé tenía alguna anormalidad o una infección. Sin embargo, en la mayoría de los casos, se debe a algo que sucedió durante la labor de parto o en el momento mismo del nacimiento.

Un problema con la placenta o con el cordón umbilical como por ejemplo un nudo en el cordón, puede significar que el bebé no tuvo suficiente oxígeno en ese momento.

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Embarazo

¿Se puede prevenir la muerte del feto?

En algunos casos sí, pero en otros…no. Como parte del cuidado prenatal, el médico vigilará la aparición de signos que denoten que hay problemas en la madre o en el bebé.

Evidentemente una vigilancia adecuada de un embarazo disminuye la probabilidad de un evento adverso de esta naturaleza, pero en el caso de otros problemas inesperados como defectos genéticos, la muerte en útero ocurrirá sin ningún aviso.

La consulta con el especialista en obstetricia permite detectar enfermedades en la madre como la diabetes y la alta presión sanguínea maternal, que pueden incrementar el riesgo de muerte del feto.

Es necesario realizar un seguimiento cuidadoso de las mujeres con embarazos de alto riesgo durante el final del embarazo. A menudo es posible determinar si el feto        tiene algún problema monitoreando los latidos del corazón del bebé. De este modo es posible comenzar un tratamiento que, a veces, puede incluir un parto prematuro que puede salvar la vida del bebé.

En la actualidad, el riesgo de que las mujeres diabéticas y con presión sanguínea elevada den a luz un bebé sin vida es bajo cuando se someten a un seguimiento regular de su embarazo.

Ninguna mujer debe fumar, beber alcohol o utilizar drogas ilícitas, todo lo cual puede incrementar el riesgo del nacimiento sin vida del bebé y de otras complicaciones del embarazo.

SEGUNDA OPINIÓN

Una de las cosas más importantes que debes hacer cuando te están dando un pronóstico malo, es tomar una segunda opinión y seguramente tu mismo médico te recomendará que lo hagas.

Es importante que te sientas totalmente segura con la experencia de los médicos que te están dando el diagnóstico y es recomendable siempre que sean más de un par de ojos que vean a tu bebé. Escribe una lista de las dudas que quieras preguntar y asegúrate de que entiendes todas las respuestas que te dan.

Pregunta acerca de las pruebas específicas que se pueden hacer para confirmar una vez más el diagnóstico.

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Embarazo

Causas de muerte de feto en el embarazo

Maternas:

  • Embarazo prolongado (de más de 42 semanas)
  • Enfermedades crónicas de la madre como puede ser la diabetes mellitus (no controlada), lupus eritematoso, hipertensión arterial o algún problema sanguíneo con formación de coágulos que contribuyen a un pobre crecimiento del bebé y al desprendimiento de la placenta.
  • Infecciones durante el embarazo como la listeriosis, salmonela o toxoplasmosis.
  • Preeclampsia y eclampsia: que pueden reducir el flujo de sangre hacia el bebé. Esta condición se asocia con el desprendimiento de la placenta.
  • Edad materna muy precoz o avanzada.
  • Algún problema en el momento del parto relacionado con la posición de presentación del bebé.
  • Incompatibilidad Rh (el Rh de la sangre materna es diferente del Rh del bebé)
  • Ruptura uterina.
  • Hipotensión severa materna (es decir, baja muy importante de la presión sanguínea de la madre)
  • Muerte materna.

Fetales:

  • Gestación múltiple (de dos o más bebés).
  • Retardo en el crecimiento intrauterino: los bebés que crecen muy lentamente tienen un riesgo incrementado de morir durante el embarazo. En el ultrasonido de control se observa que el bebé simplemente no crece lo suficiente dentro del útero.
    • Se dice que estos bebés son “pequeños para su edad gestacional”.
  • Anomalías congénitas o genéticas: un defecto físico o genético en el bebé. Esto significa que el cerebro, el corazón u otro órgano, no se desarrollaron apropiadamente.
    • Las malformaciones múltiples en los bebés pueden ser por causa genética, del medio ambiente o desconocida y siempre será importante consultar a un especialista en genética en casos de bebés que fallecen en estas circunstancias.
    • Entre el 5 y el 10 por ciento de los bebés nacidos sin vida tienen anomalías relacionadas con sus cromosomas, que son las estructuras que contienen el material genético que determina nuestras características físicas. En pérdidas antes de la semana 20, son particularmente frecuentes las anormalidades de los cromosomas, aunque pueden provocar la muerte del feto en cualquier momento del embarazo.
  • Infecciones: Las infecciones bacterianas que afectan al feto o a la placenta son una causa importante de las muertes fetales que ocurren entre las semanas 24 y 27 de gestación. A veces la mujer embarazada puede tener una infección que puede pasar inadvertida (como las infecciones del tracto genital y urinario y ciertos virus como el parvovirus) hasta que ha provocado serias complicaciones, tales como la muerte del feto o su nacimiento en forma prematura (antes de terminar la semana 37 del embarazo).
    • Después del parto, es posible demostrar si la muerte del feto fue provocada por una infección bacteriana mediante la realización de pruebas especiales a la placenta.

Placentarias:

  • Insuficiencia placentaria. Se piensa que los problemas con la placenta son la causa más común de la muerte del bebé en el útero. Casi dos tercios de los bebés que mueren se pierden porque la placenta es insuficiente para lograr que el bebé se nutra y crezca adecuadamente.
    • No se entiende cuáles son las razones exactas de por qué la placenta no funciona en forma apropiada. Pero los médicos saben que si la placenta no funciona bien, los vasos sanguíneos que conectan a la mamá con el bebé se constriñen y esto da como resultado una disminución en los nutrientes y oxígeno que recibe el bebé y esto causa problemas en el crecimiento.
  • Accidentes de cordón umbilical (como nudos o aplastamiento)
  • Abrupto placentario (desprendimiento de la placenta durante el embarazo).
    • La placenta es un órgano vital para mantener la salud del bebé. El desprendimiento de la placenta, un trastorno por el que la placenta se separa del útero, desde parcialmente hasta en forma casi total, ocurre con mayor frecuencia alrededor de la semana 35 del embarazo.
    • Este trastorno provoca sangrados considerables que impide que el feto reciba la cantidad adecuada de oxígeno y le puede llegar a causar la muerte. El ultrasonido puede diagnosticar el desprendimiento de la placenta, si se detecta tempranamente se debe realizar una cesárea urgente que puede salvar la vida del bebé.
    • Las mujeres que fuman o utilizan cocaína tienen más de riesgo de desprendimiento.
  • El envejecimiento grave de la placenta, la formación de coágulos placentarios son otros problemas que impiden que el feto reciba suficiente oxígeno y nutrientes, también contribuyen a la muerte del feto.
  • Rotura prematura de membrana (se rompe la bolsa de aguas antes del tiempo adecuado).
  • Vasa previa (una complicación obstétrica en la cual los vasos sanguíneos fetales que no están protegidos por el cordón cruzan o corren muy cerca del orificio del cuello uterino y se pueden rasgar fácilmente cuando el cuello se dilata. El resultado es que el bebé se desangra).

 

 

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Complicaciones, Embarazo, Otras

Infección Urinaria durante el Embarazo

Introducción

En las personas sanas, la orina que se encuentra dentro de la vejiga es estéril, no hay bacterias ni otros microorganismos infecciosos presentes, sin embargo, pueden entrar bacterias a las vías urinarias las cuales se eliminan rápidamente del cuerpo antes de que causen síntomas, pero cuando superan las defensas naturales del organismo, causan infección.

La importancia de las infecciones urinarias radica no solo en su frecuencia, sino también en el riesgo que entrañan de originar otras alteraciones como: extensión de la infección, lesión renal progresiva e irreversible y recurrencias, cuyo tratamiento y prevención resultan a menudo difíciles.

Las infecciones del tracto urinario (ITU), son quizás las complicaciones médicas más frecuentes durante la gestación y pueden tener una repercusión importante tanto en la salud de la madre como en la evolución del embarazo.

Definición

La infección urinaria (o infección del tracto urinario) es una infección causada generalmente por bacterias que puede afectar a la uretra y a la vejiga, o extenderse a los uréteres y riñones.

Anatomía del sistema urinario

El sistema urinario es el conjunto de órganos que participan en la formación y evacuación de la orina. Está constituido por:

  • Los riñones son un órgano par con forma de fríjol cuya misión principal es eliminar los químicos no necesarios y los residuos que hay en la sangre. Los riñones convierten estos residuos en un líquido muy característico que recibe el nombre de
  • Los riñones están conectados a la vejiga mediante unos pequeños conductos llamados uréteres. La orina se desplaza a través de estos uréteres y baja hasta la vejiga. La vejiga es un órgano ahuecado donde se almacena la orina.
  • Cuando te dispones a orinar, la orina se desplaza a través de la uretra hacia el exterior del cuerpo.

Los riñones filtran la sangre y producen la orina, que varia en cantidad y composición.

infecciones1

 

Tipos de infecciones urinarias

Se pueden distinguir distintos tipos de infecciones urinarias:

Se denomina bacteriuria cuando en el análisis de la orina, se detectan bacterias. Puede ser asintomática (no da síntomas).

Cuando la infección es en la vejiga recibe el nombre de cistitis y cuando se localiza en la uretra se llama uretritis. Se llama pielonefritis cuando la infección se desplaza hacia los riñones.

Las infecciones urinarias también pueden ser:

  • Infecciones urinarias no complicadas:Comprende las cistitis y las pielonefritis no complicadas en mujeres jóvenes y que no tienen otros problemas de salud.
  • Infecciones urinarias complicadas:Las infecciones urinarias en las embarazadas, se deben considerar como complicadas.
  • Infecciones urinarias recurrentes:puede tratarse de repeticiones de infecciones causadas por el mismo agente causante o de reinfecciones (distinto agente causante).
  • Infección urinaria crónica:persistencia del mismo microorganismo durante meses o años, con repeticiones tras los tratamientos.

¿Cuándo se produce la infección urinaria?

Se produce infección cuando las bacterias de tu piel, vagina o recto entran en tu uretra y se desplazan hacia arriba. A menudo las bacterias se detienen en la vejiga y se multiplican allí, causando una inflamación y los típicos síntomas de la cistitis (necesidad de orinar frecuentemente y sensación de ardor intenso al orinar).

Pero las bacterias también pueden desplazarse desde tu vejiga, a través de los uréteres, hasta uno de tus riñones o los dos, causando una pielonefritis (es la complicación médica grave más común durante el embarazo). Esta infección puede extenderse a tu corriente sanguínea y poner tu vida en peligro.

¿Qué tan frecuente es la infección urinaria en la mujer?

Las mujeres tienen un alto porcentaje de infecciones urinarias, hasta un 15 a 20 % de las mujeres han presentado alguna vez una infección urinaria a lo largo de su vida. Además las infecciones urinarias femeninas suelen ser recidivantes (que se repiten).

En general, las infecciones urinarias constituyen un problema que es mucho más frecuente en la mujer que en el varón. Esta tendencia tiene varias explicaciones:

  • La uretra femenina es mucho más corta que la del varón.
  • Está próxima a la vagina que puede estar colonizada por varios gérmenes.
  • Está próxima al ano con su contenido séptico (contaminado).
  • Se incrementa la susceptibilidad en determinadas condiciones como la diabetes, prolapsos (salida de algún órgano como la vejiga hacia el exterior del cuerpo) cicatrices de partos, incontinencia urinaria, etc.

Algunas mujeres presentan esta infección varias veces. Si pasan meses o años sin tratar la infección, los riñones pueden lesionarse.

Infección del tracto urinario y embarazo

La infección urinaria constituye la complicación médica más frecuente del embarazo y se puede manifestar como:

  1. Bacteriuria asintomática (en un 4 a un 7 % de mujeres en edad reproductiva se puede demostrar la presencia de 100.000 bacterias por mililitro de orina, pero raramente dan síntomas),
  • Esta bacteriuria asintomática no tratada desarrolla cistitis sintomática en el 30%, que puede, a su vez, convertirse en pielonefritis en el 50% de los casos.
  • Además, se asocia con riesgo incrementado de parto prematuro, retardo del crecimiento intrauterino y recién nacidos con bajo peso al nacer, anemia, eclampsia e infección del líquido amniótico.
  1. Cistitis (infección e inflamación de la vejiga) y
  2. Pielonefritis (infección renal) La pielonefritis aguda durante el embarazo puede producir complicaciones serias como septicemia (infección generalizada) materna.

El médico puede hacer el diagnóstico cuando en el análisis de orina se detecta la presencia de bacterias (bacteriuria) acompañado de síntomas como fiebre, escalofríos, náuseas, vómitos y dolor en los flancos.

¿Por qué se incrementa la predisposición a las infecciones urinarias en el embarazo?

Los cambios anatómicos y funcionales que ocurren durante el embarazo, guardan una relación directa con el aumento a la predisposición para las infecciones urinarias:

  • Los riñones aumentan de tamaño por aumento del flujo sanguíneo que deben filtrar y por lo tanto aumenta la longitud renal.
  • Tu vejiga es desplazada de su sitio habitual y (a causa del aumento de la hormona progesterona), pierde tono muscular durante el embarazo. Resulta más difícil vaciarla por completo cuando orinas y se vuelve más propensa al reflujo, una condición en la que parte de la orina vuelve a subir por los uréteres hacia los riñones.
  • El útero (que sigue creciendo) comprime los uréteres, especialmente el del lado derecho, acumulándose en los uréteres hasta 200 ml de orina. Este estancamiento urinario favorece el crecimiento de las bacterias.
    • El crecimiento del abdomen también dificulta que te hagas una buena higiene cuando vas al baño.
  • Se cambia el pH de la orina y se hace más alcalino.
  • Otro de los factores que contribuyen para la multiplicación de bacterias es la mayor eliminación de proteínas por la orina conforme avanza la gestación.

Durante el embarazo la presencia de bacterias en la orina adquiere otra dimensión en la salud de la embarazada. El riesgo de que una bacteriuria se transforme en pielonefritis es de 1.4 % fuera del embarazo, mientras que en la gestación aumenta hasta el 28 %.

La identificación y tratamiento precoz de la bacteriuria permite mejorar los resultados del embarazo.

 ¿Cuál es la causa de las infecciones urinarias?

Más del 90% de las infecciones urinarias son causadas por un solo microorganismo (escherichia coli) y solamente en un 10% de los casos la infección es polimicrobiana. Estos gérmenes pasan generalmente a través de la uretra y se desplazan hacia el tracto urinario.

La infección de vías urinarias causada por estreptococos Beta hemolítico es causa de ruptura de membranas y parto prematuro.

Factores de riesgo

A continuación mencionamos algunos factores que facilitan la adquisición de una infección en el tracto urinario.

  • Autoinfección: Limpiarse de atrás hacia delante después de orinar o defecar.
  • Ser diabética.
  • Haber tenido antes una infección en el tracto urinario.
  • Retener la orina en lugar de orinar cuando tienes ganas.
  • Sexo y actividad sexual:  El coito propicia la introducción de bacterias en la vejiga y se asocia temporalmente al inicio de cistitis. Orinar tras el coito, disminuye el riesgo de cistitis.
  • El uso de compuestos espermicidas con un diafragma, o de preservativos recubiertos de espermicida, modifica la flora bacteriana normal de la zona genitourinaria, y se ha asociado a un aumento de infecciones urinarias.
  • Embarazo: las embarazadas son más susceptibles a padecer infecciones urinarias.
  • Obstrucción: cualquier obstáculo que interfiera en el flujo de orina (tumor, estrechamiento, aumento de tamaño de la próstata, cálculos…).
  • Tratamiento con antibióticos para otro problema médico: El tratamiento reciente con antibióticos por cualquier motivo puede haber cambiado el tipo y número de bacterias en la vagina y en la uretra.

Todo esto puede llegar a explicar por qué algunas mujeres siguen teniendo infecciones de las vías urinarias mientras que otras no las tienen nunca o bien las tienen esporádicamente.

¿Cuáles son los síntomas de una infección en la vejiga?

Los síntomas de una infección en la vejiga o cistitis varían en cada mujer. Los más comunes incluyen:

  • Dolor, incomodidad o ardor al orinar y posiblemente durante las relaciones sexuales.
  • Molestia pélvica o dolor en la parte inferior del vientre (generalmente justo arriba del pubis).
    • Dolor, sensación de presión o sensibilidad extrema en la zona de la vejiga.
  • Necesidad frecuente o incontrolable de orinar, incluso cuando hay muy poca orina en la vejiga.
    • Después de orinar sigues con el deseo de orinar un poco más.

También puedes notar que tu orina huele mal o está turbia. Y quizás notes que tiene moco o sangre. Puedes tener unas décimas de fiebre, pero lo más común es que tu temperatura siga siendo normal.

La necesidad frecuente de orinar, levantarte en la noche y la presión o molestia arriba del pubis, son molestias comunes durante el embarazo, y, por lo tanto, son síntomas que no ayudan mucho al médico a diagnosticar una cistitis, porque pueden ser el resultado de cambios fisiológicos normales en el embarazo que mencionamos con anterioridad (el crecimiento del útero que ejerce una presión sobre la vejiga, la expansión del volumen de sangre y el aumento de filtración en los riñones).

Puede resultar difícil saber con certeza si tienes cistitis, especialmente si tus síntomas son leves.

 ¿Cuáles son los síntomas de una infección en los riñones?

Si muestras señales de una posible infección en los riñones, debes buscar atención médica inmediatamente. Los síntomas a menudo se presentan de forma repentina e incluyen:

  • Fiebre alta (a menudo con temblores, escalofríos o sudores).
  • Dolor en la parte baja de la espaldao en el costado bajo tus costillas, en uno o ambos lados, o posiblemente en el abdomen.
  • Náuseas y vómitos.

También puedes notar sangre o pus en tu orina y los síntomas de la cistitis.

¿Qué sucede si tengo bacteriuria asintomática durante el embarazo?

La bacteriuria asintomática se ha asociado con:

  • Amenaza de aborto.
  • Parto prematuro que puede estar asociado a un bajo peso al nacer.
  • Retardo en el crecimiento del bebé dentro del útero (crecimiento intrauterino).
  • Ruptura de membranas
  • Muerte fetal dentro del útero.

Y, si no se trata, tienes un 40 por ciento de posibilidades de desarrollar una infección en los riñones. Sin embargo, con el tratamiento adecuado tu riesgo se reduce dramáticamente a entre el 1 y el 4 por ciento.

Diagnóstico y tratamiento

Para saber si tienes bacterias en tus vías urinarias, tu doctor analizará una muestra de tu orina en tu primera visita prenatal, tanto si tienes síntomas como si no los tienes y te pedirá que te hagas un examen general de orina en el laboratorio. Si este cultivo inicial de orina da negativo, tus posibilidades de desarrollar una infección en las vías urinarias después, son pequeñas.

Pero si resulta positivo, es posible que necesiten hacerte otro tipo complementario de estudios entre los que podemos mencionar:

  • Análisis sistemático de orina y sedimento:para hallar la presencia de leucocitos, bacterias, sangre…
  • Tiras reactivas:para saber rápidamente si hay o no posible infección mediante distintas reacciones químicas.
  • Cultivo de orina. El cultivo de orina es una de las mejores pruebas, pero aún así puede dar posibles falsos negativos.
  • Ecografía abdominal: se trata de la prueba de imagen más utilizada. Es fundamental para descartar dilataciones por cálculos o tumores, o complicaciones.

¿Qué sucede si tengo bacteriuria asintomática (sin síntomas)?

Si tu análisis da positivo, te tratarán con antibióticos por vía oral que son seguros durante el embarazo. Tomar la dosis completa de antibióticos, que generalmente dura una semana, debería curar la infección.

Al finalizar el tratamiento te harán otro análisis de orina para asegurarse de que ya no hay infección. Si no se ha curado, te tratarán con un antibiótico diferente. Deberían repetir los análisis de orina a intervalos regulares durante tu embarazo para asegurarse de que no tienes otra infección.

Si la bacteriuria recurre, te tratarán de nuevo y probablemente te recetarán una dosis baja y continua de antibióticos durante el resto del embarazo para prevenir la recurrencia.

Es necesaria una ingesta diaria de abundantes líquidos.

¿Qué sucede si contraigo una infección en la vejiga?

Si contraes una infección en la vejiga (cistitis) durante el embarazo te tratarán de forma similar, aunque quizás durante menos días.

Los antibióticos probablemente te aliviarán los síntomas con rapidez, pero es fundamental que termines el tratamiento para poder eliminar todas las bacterias que se encuentran en las vías urinarias.

Después del tratamiento, te realizarán un nuevo análisis para que no queden dudas de que la infección ha desaparecido. Luego te deberían hacer pruebas a intervalos regulares durante todo el embarazo para asegurarse de que no te has infectado nuevamente. Si las infecciones en la vejiga siguen recurriendo, puede que necesites recibir una dosis baja de antibióticos diariamente, como medida de prevención.

Es necesaria una ingesta diaria de abundantes líquidos.

¿Qué sucede si tengo cistitis aguda?

La cistitis aguda por la presencia de síntomas repentinos como el dolor intenso y el aumento de la frecuencia para orinar en personas que no tienen fiebre y en las que no existe ninguna otra evidencia de alguna enfermedad sistémica.

 Tu médico seguramente iniciará el tratamiento antes de que lleguen los resultados del laboratorio. Es importante que termines el tratamiento tal cual te lo prescriben para evitar la recurrencia.

 ¿Qué sucede si contraigo una infección en los riñones?

Si tienes una infección en los riñones durante el embarazo, te ingresarán en el hospital y te administrarán antibióticos por vía intravenosa. Se controlará tu temperatura, tu tensión arterial, pulso, respiración y capacidad de orinar y se vigilará también el latido del corazón de tu bebé y si presentas alguna señal de parto prematuro.

El tiempo de hospitalización debido a una infección en los riñones, varía y dependerá de tu caso particular. Si tras la evaluación inicial, durante las primeras 12 a 24 horas, se determina que tu caso no es grave y estás respondiendo adecuadamente al tratamiento y además no hay señales de un parto prematuro, tu doctor posiblemente decida darte de alta. El resto del tratamiento, probablemente consistirá en antibióticos orales.

Sin embargo, si tu infección es grave necesitarás permanecer en el hospital para que te traten y te tengan en observación. No te dejarán salir del hospital hasta 24 a 48 horas después de que tu temperatura vuelva a su nivel normal y no presentes síntomas.

Una vez hayas completado el tratamiento, te recetarán una dosis baja y continua de antibióticos durante el resto del embarazo para prevenir otra infección. Sin esta terapia diaria supresiva, corres un alto riesgo de contraer otra infección en los riñones.

¿Qué puedo hacer para evitar contraer una infección de las vías urinarias?

Sigue estos pasos para reducir la probabilidad de contraer una infección de las vías urinarias:

  • Bebe mucha agua, por lo menos ocho vasos grandes de agua (aproximadamente de 8 onzas o 250 mililitros) diariamente.
  • No ignores las ganas de hacer pipí. Y vacía completamente la vejiga al orinar.
  • Después de defecar, límpiate de adelante hacia atrás para evitar que las bacterias de las heces se acerquen a la uretra.
  • Mantén el área genital limpia con jabón suave y agua.
  • Antes y después de mantenerrelaciones sexuales, limpia el área genital y haz pipí.
  • Bebe jugo de arándano (cranberry). Hay estudios que demuestran que el jugo de arándano puede reducir los niveles de bacteria y evitar que se introduzcan nuevas bacterias en las vías urinarias. Sin embargo, beber este jugo no curará una infección ya existente, de modo que si tienes síntomas, no dejes de consultar con tu médico de inmediato para que te recete antibióticos.
  • Evita los productos de higiene femenina (en aerosol o en polvo) y los jabones fuertes que puedan irritar la uretra y los genitales y convertirlos en un caldo de cultivo para las bacterias.
  • No te des duchas vaginales durante el embarazo.

Preguntas frecuentes:

¿Cómo puedo saber si tengo una ITU?

Algunas veces los gérmenes pueden crecer en el tracto urinario pero puedes NO tener ningún síntoma. Esto se llama bacteriuria asintomática.

Tu médico le puede hacer un análisis para comprobar el diagnóstico. La bacteriuria asintomática debe tratarse en las mujeres embarazadas pero no necesita ser tratada en la mayoría de las demás mujeres.

¿Cómo puedo saber si el tratamiento no está funcionando?

Si tienes fiebre mayor de 38,05 grados, escalofríos, dolores en la parte baja del estómago, náusea, vómito o dolor en el costado debes llamar a tu médico. Igualmente debes llamarlo si tienes contracciones o si, después de tomar medicamento durante tres días, todavía tienes una sensación de ardor cuando orinas.

¿Puedo hacer algo para evitar que esto ocurra de nuevo?

Puedes ayudar a prevenir las ITU de varias maneras:

  • Bebe de 6 a 8 vasos de líquido diariamente, el agua es lo mejor.
  • Elimina las comidas refinadas, los jugos de frutas, la cafeína, el alcohol y el azúcar.
  • Toma vitamina C.
  • Desarrolla el hábito de orinar en el momento en el que tienes el deseo de orinar y vacía completamente tu vejiga.
  • Orina antes y después de las relaciones sexuales.
  • Evita las relaciones sexuales durante el tratamiento de una infección urinaria.
  • Después de orinar sécate sin friccionar y mantén el área genital limpia. Asegúrate de limpiarte siempre de adelante hacia atrás.
  • Evita usar jabones fuertes, duchas, cremas antisépticas, polvos y sprays de higiene femenina.
  • Cámbiate diariamente la ropa interior y procura que sea de algodón.
  • Evita usar pantalones demasiado ajustados.

Referencias