Introducción

La toxoplasmosis es una enfermedad causada por un parásito llamado toxoplasma gondii.

 La toxoplasmosis es una enfermedad causada por un parásito llamado toxoplasma gondii. La toxoplasmosis es una enfermedad causada por un parásito llamado toxoplasma gondii.

El Toxoplasma puede causar infecciones leves y no dar síntomas, o puede ser causa de infecciones mortales que afectan principalmente al feto durante el embarazo, ocasionando lo que se llamaToxoplasmosis Congénita. Los bebés infectados pueden desarrollar complicaciones serias.

Se transmite generalmente desde los animales a los seres humanos a través de diferentes vías de contagio siendo los huéspedes definitivos los gatos. Por suerte, una mujer embarazada puede tomar una serie de precauciones sencillas que tienden a reducir las probabilidades de que se infecte.

Características del Parásito del Toxoplasma

  1. No resiste las altas temperaturas
  2. Su periodo de Incubación es de una a dos semanas
  3. Se puede presentar bajo tres formas:
    • Quistes  Tisulares (en el tejido), la forma quística  que adquiere este parásito lo hace más resistente, pueden encontrarse en cualquier órgano, pero predominan en el SNC (Sistema Nervioso Central, que es el cerebro) y en el tejido muscular del corazón y músculo esquelético, donde pueden persistir en fase de latencia (están inactivos) durante toda la vida pero son capaces de reactivarse. La desecación, la congelación por debajo de los -20ºC y el calor superior a 60º C, los destruye.

 Quistes Tisulares (en el tejido), la forma quística que adquiere este parásito lo hace más resistente, pueden encontrarse en cualquier órgano, pero predominan en el SNC (Sistema Nervioso Central, que es el cerebro) y en el tejido muscular del corazón y músculo esquelético, donde pueden persistir en fase de latencia

  • Ooquistes (o huevecillos) de forma oval que se eliminan por las heces de los gatos (únicos huéspedes definitivos del toxoplasma gondii) que han ingerido quistes tisulares de sus presas, con excreción de hasta 10 millones de ooquistes diarios por las heces durante 1-3 semanas a partir de los 15-25 días de producirse la infección. La ebullición o bien el calor seco a temperaturas superiores a los 66º C  los destruye. Cuando el gato ingiere los quistes tisulares de sus presas, tarda alrededor de 20 a 24 días en generar ooquistes.

 Ooquistes (o huevecillos) de forma oval que se eliminan por las heces de los gatos (únicos huéspedes definitivos del toxoplasma gondii) que han ingerido quistes tisulares de sus presas

  • Taquizoitos son las formas invasivas, se multiplican rápidamente y se encuentran  en la infección aguda. Los taquizoitos entran por la boca y se diseminan por el organismo. Una vez dentro de los tejidos forman quistes titulares (en los tejidos).

 Taquizoitos son las formas invasivas, se multiplican rápidamente y se encuentran en la infección aguda. Los taquizoitos entran por la boca y se diseminan por el organismo. Una vez dentro de los tejidos forman quistes titulares (en los tejidos).

¿Con qué frecuencia se produce la toxoplasmosis?

La toxoplasmosis es una de las infecciones más comunes del mundo. No obstante, la mayoría de las personas infectadas no presenta síntomas por lo que es posible que no sean consientes de haber padecido esta enfermedad.

Normalmente, la infección activa ocurre sólo una vez en la vida y la persona se vuelve inmune por el resto de su vida. Si bien el parásito permanece dentro del cuerpo por tiempo indefinido, generalmente no produce daños y se mantiene inactivo a menos que el sistema inmunológico de quien lo lleva no funcione correctamente (por ejemplo, si el individuo tiene SIDA). Por lo general, las mujeres que desarrollan inmunidad a la infección antes del embarazo no corren peligro de transmitir la infección a sus bebés.

Algunos especialistas recomiendan a las mujeres posponer el embarazo por seis meses después de contraer toxoplasmosis ya que ha habido algunos casos de mujeres que se infectaron cerca del momento de la concepción que transmitieron la infección a sus bebés.

Aproximadamente el 85 por ciento de las mujeres en edad fértil nunca han tenido toxoplasmosis y son propensas a esta enfermedad.

¿Qué es la toxoplasmosis congénita?

Es un grupo de síntomas que se presentan cuando un bebé (feto) está infectado con el parásitotoxoplasma gondii en cualquier etapa del embarazo.

El feto puede quedar infectado con toxoplasmosis si la madre resulta infectada durante el embarazo. La infección se le puede propagar al feto durante el embarazo mismo o durante el período de dilatación o el parto.

Incidencia de la Toxoplasmosis Congénita

A nivel mundial los bebés afectados por la toxoplasmosis congénita varía de: 1 de cada 1000 a 1 de cada 10,000 bebés nacidos vivos, dependiendo de la zona geográfica, estilo de vida y nivel socioeconómico de la población.

Clasificación

Se suelen diferenciar cuatro grandes categorías clínicas en el estudio de la toxoplasmosis:

  1. Toxoplasmosis aguda adquirida en personas inmunocompetentes (son personas consideradas sanas en las que el sistema inmunológico trabaja normalmente).
  2. Toxoplasmosis aguda adquirida o reactivada en personas inmunodeprimidas (son personas en las que el sistema inmunológico no responde normalmente a las agresiones de las enfermedades, por ejemplo, personas con SIDA o que reciben quimioterapia).
  3. Toxoplasmosis ocular (suele ser el resultado de la infección congénita del ojo y no da síntomas hasta que el individuo tiene de 20 a 40 años).
  4. Toxoplasmosis congénita.

La Toxoplasmosis Adquirida se puede presentar en personas sanas; las personas infectadas pueden no tener síntomas o experimentar un trastorno leve parecido a la influenza o una enfermedad más grave e incluso letal. Lo característico es que los individuos sanos tengan pocos síntomas o que éstos sean leves.

Las personas sanas desarrollan inmunidad de por vida contra este parásito, aún cuando la enfermedad haya sido asintomática (sin síntomas). El parásito permanece en el cuerpo indefinidamente, generalmente es inocuo y no está activo. Se cree que el 60% de los propietarios de gatos, han sido expuestos al toxoplasma.

En personas con deficiencia en la inmunidad o con defensas bajas, la Toxoplasmosis adquirida se puede presentar de dos maneras:

  • Padecen la primera infección con síntomas muy fuertes.
  • Aún habiendo padecido la enfermedad, no adquirieron inmunidad como sucede en una persona sana y la infección regresa repentinamente, con el riesgo de que la infección se pase al cerebro, los ojos, el corazón y el hígado.

 

¿Cuáles son las fuentes de infección?

La Toxoplasmosis no se trasmite de un humano a otro. El T. Gondii se transmite a los humanos a por tres rutas principales:

  1. Alimentos contaminados: Por comer carne infectada cruda o no bien cocida, especialmente puerco, cordero y animales de caza:
    1. Al igual que en los seres humanos, en muchos otros animales los taquizoitos se diseminan por el organismo  formando  en los tejidos los quistes tisulares. El ser humano al consumir la carne cruda o mal preparada, introduce en su cuerpo la forma quística del toxoplasma. Una vez ingeridos, la pared de los quistes tisulares, es destruida por las enzimas digestivas (las enzimas son substancias que aceleran los procesos de digestión y absorción) con lo cual se liberan los taquizoítos. Éstos se diseminan, invaden el tejido intestinal y, a través de la sangre o de la linfa, pueden alcanzar cualquier órgano aunque se localizan, sobre todo, en los músculos esqueléticos, el corazón y el cerebro.
      El ser humano al consumir la carne cruda o mal preparada, introduce en su cuerpo la forma quística del toxoplasma

      1. Por otro lado, una persona que consume con la necesaria frecuencia verduras y frutas, puede consumirlas sin el adecuado lavado para eliminar el parásito en algún momento. También puede consumirlas cuando fueron manipuladas por terceros sin poder supervisar si el lavado es suficiente (por ejemplo, en restaurantes).
      2. Consumo de agua   contaminada. El agua contaminada y los utensilios utilizados para preparar la carne como tablas para picar, cuchillos o alimentos que hayan estado en contacto con la carne contaminada, también pueden infectar a la persona.
      3. Consumo de la leche de cabra sin hervir.
      4. También se puede adquirir la infección, por medio de las moscas y las cucarachasque estuvieron en contacto con las heces infectadas, estos insectos llegan a los alimentos y los contaminan.
    2. Manipulación de tierra: Otra vía de contagio suele producirse entre personas que trabajan la tierra con las manos, bien agricultores, bien en labores de jardinería. En los suelos suele estar presente el parásito en gran cantidad. Una persona que manipule la tierra con las manos desnudas puede introducir restos de tierra bajo las uñas. Pese a un lavado de manos con agua y jabón, siempre puede quedar tierra bajo las uñas. Después, si se lleva las manos a la boca, es fácil infectarse de éste y/o de otros parásitos.
  2. Gatos: El gato reproduce en el intestino al parásito  y es expulsado  en forma de ooquiste (o huevecillo)  en las heces fecales, generalmente en su caja de arena o bien en la tierra del jardín. Elooquiste madura y en un término de 24 hrs., el parásito se hace altamente infeccioso y se forman los llamados taquizoitos, que son resistentes a la mayoría de los desinfectantes. Bajo ciertas condiciones de humedad y temperatura  el parásito puede vivir en la tierra más de un año.  Las personas se infectan  por falta de cuidado al manipular el contenido de una caja para excrementos de gato infectada, o  bien  cuando se hacen labores de jardinería en que la tierra contiene heces del  animal y no se lavan las manos.
    Gatos: El gato reproduce en el intestino al parásito y es expulsado en forma de ooquiste (o huevecillo) en las heces fecales, generalmente en su caja de arena o bien en la tierra del jardín. El ooquiste madura y en un término de 24 hrs
  3. Infección fetal: Por transferencia a través de la placenta -de una madre infectada a su bebé- durante el embarazo, este tipo de infección da origen a la toxoplasmosis congénita.

 Infección fetal: Por transferencia a través de la placenta -de una madre infectada a su bebé- durante el embarazo, este tipo de infección da origen a la toxoplasmosis congénita.

El riesgo para el bebé es menor cuando la infección ocurre en las últimas semanas de gestación.

Otros: Con muchísima menos frecuencia, el parásito puede ser transmitido por transfusión de sangre, o trasplante de órganos.

¿Qué probabilidades tiene una madre infectada embarazada de transmitir la toxoplasmosis a su bebé?

La Toxoplasmosis adquirida toma otra dimensión cuando la persona infectada por primera vez es una mujer embarazada.

Se sabe que el parásito de la toxoplasmosis atraviesa la placenta. En el 40% de los casos en que la embarazada tiene toxoplasmosis, el bebé también se infecta. Si el contagio ocurre, tanto la madre como el bebé están en riesgo de sufrir daños y complicaciones muy graves.

El grado de transmisión está directamente relacionado con la edad gestacional en el momento de la infección mientras que el grado de daño fetal tiene una relación inversa. Los estudios sugieren que, cuando una madre contrae la infección durante el primer trimestre del embarazo, aproximadamente el 15% de los fetos también se infecta, en comparación con el 30% durante el segundo trimestre y el 60 por ciento durante el tercero.

No obstante, cuanto más cerca del comienzo del embarazo ocurre la infección, más graves suelen ser los síntomas de la infección en el feto ya que la organogénesis (la formación de los órganos, aparatos y sistemas del bebé),  se lleva a cabo durante el primer y segundo trimestre.

  • 1er. Trimestre, puede haber aborto espontáneo
  • 2do. Trimestre, puede ocurrir aborto espontáneo o daño severo
  • 3er. Trimestre, puede existir daño que no es aparente al momento de nacer

Como ya lo mencionamos anteriormente, la transmisión durante el embarazo hacia el bebé ocurre predominantemente en mujeres que se infectaron por primera vez durante la gestación. En muy pocos casos sucede cuando la infección se reactiva y casi siempre es porque la madre tiene el sistema inmunológico comprometido (por ejemplo cuando tiene SIDA o por algún tratamiento con corticoesteroides).

Si en el pasado tuviste la enfermedad, ya desarrollaste inmunidad de por vida contra la infección, de tal manera que tu bebé no estará en riesgo de infectarse. Sin embargo si la mujer embarazada tiene un sistema inmunológico debilitado, como sucede en las personas que padecen SIDA, pueden desarrollar la enfermedad por primera vez durante el embarazo con síntomas muy agudos, o si ya la padeció, se puede reactivar la enfermedad  y contagiar a su bebé.

¿Cuáles son los síntomas  de la Toxoplasmosis Adquirida durante el embarazo?

En la mujer embarazada los síntomas de la infección no suelen ser evidentes o solamente provocan fiebre, síntomas parecidos a la gripa, o leve inflamación de los ganglios linfáticos que pasa desapercibida. Puede acompañarse de malestar general, dolores musculares, sudoración nocturna, dolor de garganta y a veces, erupción en la piel y, más raramente, podrían presentar cambios visuales debido a corioretinitis (trastorno de la retina del ojo) por toxoplasmosis.

Un estudio reciente  reveló que el 52% de las mujeres que tuvieron un bebé infectado, no se acordaban de haber estado enfermas durante el embarazo ni identificaban ningún factor de riesgo.

En los casos de toxoplasmosis aguda en enfermas con alteración del sistema inmunológico, suelen presentarse síntomas por la afectación cerebral (convulsiones, alteraciones de la motricidad, del habla o sensoriales, debilidad, síntomas psiquiátricos, etc.). En los casos con afectación pulmonar suele haber fiebre, tos y dificultad para respirar. La toxoplasmosis ocular provoca alteraciones en la visión.

Los riesgos maternos al  contagiarse durante el embarazo son:

Aborto espontáneo, parto prematuro, retardo del crecimiento intrauterino, muerte del bebé antes de nacer.

¿Qué síntomas produce la toxoplasmosis en el bebé?

El riesgo de daño al bebé está en relación directa con el momento en que la madre contraiga la enfermedad. Los síntomas que aparecen en el recién nacido aparecen entre las 3 semanas y los 3 meses de vida del niño e incluso pueden manifestarse años después del nacimiento.

Si la infección ocurre al final del embarazo, la infección primaria lleva un alto riesgo de transmisión fetal; se produce una forma aguda generalizada, donde la mitad de los recién nacidos son prematuros y de bajo peso, con un cuadro clínico de tipo séptico (infeccioso) caracterizado por: fiebre, crecimiento anormal del hígado y del bazo (hepatoesplenomegalia),  ictericia (coloración amarilla de las piel y las mucosas) y en algunos casos miocarditis (inflamación del músculo cardíaco) o neumonía.

  • Alrededor del 80% de ellos no tienen hidrocefalia, ni erupción en la piel y rara vez existe daño neurológico y ocular. La mortalidad de estos niños es elevada y llega al 12% si no se aplica el tratamiento.

Cuando la infección fetal ocurre alrededor de la mitad del embarazo, la etapa de infección generalizada se produce durante la vida intrauterina y en el momento del nacimiento se encuentran síntomas de encefalitis (inflamación del cerebro). En los casos benignos el niño puede tener peso normal y presentar pocas manifestaciones de la enfermedad, pero después de varias semanas se vuelve apático, desarrolla dificultad para comer y ocasionalmente presenta convulsiones.

En los casos en que la infección se produce al principio del embarazo, cuando se está formando la placenta, el parásito pasa al feto y se desarrolla la enfermedad en la vida intrauterina. Toda la infección generalizada y los daños, ocurren en el feto y en el momento del nacimiento ya el niño tiene las secuelas.
La triada clásica de signos sugestivos de Toxoplasmosis Congénita incluye:

  1. lesiones oculares La secuela (el daño) más importante es la coriorretinitis, (infamación de la retina y la coroides del ojo) encontrándose un 75% de los casos con lesiones oculares 11 años después del nacimiento; el parásito llega al ojo sobre todo por la circulación sanguínea, y ocasiona una inflamación focal de la retina que afecta con rapidez otras partes del ojo (coroides), es bilateral en el 85% de las personas y afecta la mácula en el 58% de ellas.
      1. Dependiendo el lugar de la retina donde se encuentre la lesión los síntomas son más graves, afectan la agudeza visual. Solo ocasionan ceguera cuando la lesión se localiza en la mácula, que es el lugar de máxima visión.
        Infección fetal: Por transferencia a través de la placenta -de una madre infectada a su bebé- durante el embarazo, este tipo de infección da origen a la toxoplasmosis congénita. Infección fetal: Por transferencia a través de la placenta -de una madre infectada a su bebé- durante el embarazo, este tipo de infección da origen a la toxoplasmosis congénita.

     

    1. hidrocefalia (acumulación de líquido en las cavidades del cerebro) y
    2. calcificaciones intracraneales.

 

Existen también otras manifestaciones que también se asocian a este padecimiento:

  • Líquido cefalorraquídeo anormal
  • Anemia
  • Convulsiones
  • Sordera
  • Fiebre (asociada a un cuadro séptico o infeccioso).
  • Retardo del crecimiento
  • Hepatomegalia (hígado crecido).
  • Ictericia (piel amarilla)
  • Problemas de aprendizaje
  • Erupción cutánea
  • Retardo mental
  • Microcefalia (cabeza pequeña)
  • Trombocitopenia (disminución de las plaquetas de la sangre)
  • Espasticidad (contracturas musculares permanentes) y parálisis en algunas partes del cuerpo
  • Miocarditis (inflamación de la capa interna del corazón) y neumonía

La Toxoplasmosis Congénita tiene una gran variedad de presentaciones y puede confundirse con otros padecimientos causados por otros organismos como el virus del Herpes Simple, de la Rubéola y del citomegalovirus.

Los bebés que nacieron prematuramente con Toxoplasmosis, pueden desarrollar enfermedades del sistema nervioso central y ocular en los primeros tres meses de vida, mientras que los bebés que nacieron a término generalmente tienen un padecimiento más suave con crecimiento del hígado y bazo y trastornos de los ganglios linfáticos en los primeros dos meses. A menudo estos bebés presentan también infecciones en los ojos, hay ictericia (piel y ojos de color amarillento) y neumonía.

Aunque la mayoría de los bebés infectados con Toxoplasmosis nacen sin signos específicos de la enfermedad (Toxoplasmosis Congénita Subclínica) cerca del 80% de ellos tendrán problemas de aprendizaje o trastornos de los ojos más tarde en su vida. La reducción de la agudeza visual y otras lesiones oculares pueden presentarse hasta la tercera década de la vida o aún más tarde. Los problemas oculares requieren de una evaluación oftalmológica completa.

Algunos mueren a los pocos días de nacer. La toxoplasmosis contraída durante el embarazo también puede provocar un aborto espontáneo o el nacimiento sin vida del bebé.

Diagnóstico

La única manera de llegar al diagnóstico definitivo es por medio de pruebas de laboratorio.

Análisis de sangre: Un simple análisis de sangre puede confirmar si una mujer ha tenido toxoplasmosis. Es importante recordar que la transmisión del parásito al bebé durante el embarazo ocurre generalmente en mujeres que no recuerdan haber estado enfermas o que se hayan expuesto a carne cruda o a gatos, por lo que es recomendable que este análisis se haga sistemáticamente a toda mujer embarazada y tan pronto como sea posible (idealmente durante el primer trimestre) y, cuando el resultado es negativo, se recomienda repetir el estudio cada trimestre.

Un análisis que se realice durante el segundo trimestre, no podrá descartar que la infección sucediera durante el primer trimestre.

Este control permitiría una detección temprana de la infección y un inicio temprano del tratamiento.

El análisis de sangre establece si hay infección y si ésta es reciente o fue adquirida en un pasado lejano. Si los resultados sugieren una infección reciente, es importante determinar si fue adquirida durante el embarazo o poco antes de la concepción en cuyo caso, el bebé está en riesgo.

Si los análisis de sangre demuestran que no estás infectada, seguramente tu médico te hablará acerca de las precauciones que debes tomar para evitar la infección durante el embarazo.

Dada la posibilidad de que el resultado sea un falso positivo, es recomendable que esta prueba sea repetida y enviada a un laboratorio especializado en pruebas de toxoplasmosis para su confirmación antes de que el médico considere iniciar un tratamiento con medicamentos que pueden ser potencialmente dañinos para el feto.

Ultrasonido: El médico te hará un ultrasonido especial cuando sospeche que hubo una infección durante o poco antes del embarazo. El ultrasonido puede revelar la presencia de malformaciones fetales como hidrocefalia, calcificaciones en el cerebro, crecimiento del hígado y del bazo y acumulación de agua en la cavidad abdominal.  

¿Cómo se interpretan los resultados del análisis de sangre?

En realidad la prueba consiste en determinar la cantidad en sangre de inmunoglobulinas (Ig), las cuales, para este tipo de infección, son de dos clases G y M.

La inmunoglobulina G (IgG) es una sustancia sintetizada por el organismo en respuesta a la invasión de bacterias, hongos y virus.

Un anticuerpo es una proteína especial fabricada por nuestro sistema inmunológico y  cuya función es ayudar a combatir las infecciones. Nuestro organismo es capaz  de fabricar anticuerpos específicos para cada agente infeccioso. Cuando una infección ocurre estos anticuerpos  son producidos en grandes cantidades.

La inmunoglobulina M (IgM) es el primer tipo de inmunoglobulina sintetizada por el organismo en respuesta a una infección.

En la mayoría de los casos, el análisis realizado al principio del embarazo puede establecer que NO hay infección en cuyo caso se encuentran ausentes tanto los anticuerpos IgG como los IgM, o bien que la infección se adquirió hace mucho tiempo y en ese caso se encuentran presentes los anticuerpos IgG y no se encuentran los IgM.

Sin embargo, es necesario tener en cuenta que un resultado positivo durante el embarazo no necesariamente significa que hubo una infección reciente ya que los anticuerpos IgM pueden estar presentes en la sangre después de un año de la infección aguda cuando ya pasó el periodo de riesgo para el bebé. Se considera que estas mujeres son enfermas crónicas, pero este resultado alertará a tu médico para pedir un segundo análisis que confirme los valores obtenidos en la primera prueba.

La segunda muestra de sangre: El médico te pedirá un segundo análisis de sangre. Se toma generalmente 10 a 20 días después de la primera, para ver si los anticuerpos contra la infección  tienen los mismos valores o se están elevando.

Este dato es de suma importancia porque las infecciones antiguas no dañan al feto, excepto en el caso del herpes.

¿Qué el PCR?: Es una prueba que detecta al parásito en sangre mediante la detección de sus genes.

¿Cuál es el tratamiento cuando hay infección aguda durante el embarazo?

Las mujeres embarazadas con infección primaria por toxoplasma o con toxoplasmosis activa (incluyendo toxoplasmosis cerebral) deberán ser atendidas durante la gestación por especialistas apropiados.

Una vez que el laboratorio ha confirmado la infección y se sabe que ésta sucedió durante las primeros 18 semanas del embarazo o poco antes de la concepción, el médico iniciará el tratamiento con antibióticos que busca evitar la transmisión vertical del parásito al feto, cuando esta confirmación se hace después, el médico utilizará otro tipo de medicamentos que buscan también evitar la transmisión o bien dar tratamiento también al feto.

Existen dudas acerca de la efectividad del tratamiento durante el embarazo para prevenir la infección o las secuelas en los infantes. Sin embargo, los estudios que se han llevado a cabo sugieren que el tratamiento durante el embarazo se asociaba a una reducción de las secuelas en los bebés pero NO a una disminución de la transmisión materna hacia el feto de la infección por Gondii.

¿Cómo se trata a los bebés recién nacidos infectados?

Cuando se ha confirmado la infección de toxoplasmosis en la madre o el médico tiene la sospecha de una infección durante el embarazo, en el momento del nacimiento pedirá que le hagan al bebé algunos estudios de laboratorio:

  1. Análisis de  TORCH: Sus siglas significan: Toxoplasma, Rubéola, Citomegalovirus y Herpes. Este estudio se realiza  al nacer  el  bebé y tan sólo se necesita una punción pequeñísima en el dedito del bebé para obtener una muestra de sangre. (En ocasiones también se incluye el estudio de HIV y sífilis).

La prueba de TORCH  sirve para detectar ciertas infecciones congénitas (infecciones que le trasmite la madre a su bebé a través de la placenta) y que pueden ocasionar severos daños al bebé.
Si el resultado es positivo, el médico ordenará otros estudios para confirmar el diagnóstico y, tal vez, el médico le pida la prueba de TORCH a la madre para completar un buen diagnóstico.

  1. Tomografía computarizada para detectar secuelas neurológicas
  2. Examen de los ojos por el especialista
  3. Examen físico y estudios neurológicos por el especialista
  4. Anticuerpos en el cordón umbilical y en el líquido cefalorraquídeo

Tratamiento médico: Una vez confirmado el diagnóstico, el pediatra iniciará el tratamiento médico. Sin tratamiento, hasta el 85% de los bebés infectados que parece normal en el momento de nacer desarrolla problemas meses o años más tarde, como infecciones oculares que pueden afectar la vista, problemas de aprendizaje y pérdida de la audición.

Internacionalmente los médicos han aprobado un tratamiento para los bebés infectados que incluye dos tipos de antibióticos: pirimetamina y sulfadiazina. Por lo general, estos medicamentos deben continuar tomándose durante todo el primer año de vida y, en algunos casos, algún tiempo más.

Un estudio reciente realizado por el Grupo Cooperativo Nacional de Estudio de la Toxoplasmosis de Chicago (National Collaborative Chicago-Based Toxoplasmosis Study Group) comprobó que este tratamiento suele ser altamente eficaz, incluso para los bebés con síntomas graves.

El estudio comprobó que aproximadamente el 72% de los bebés infectados que recibían este tratamiento tiene una inteligencia normal y ninguno de ellos ha desarrollado pérdida de la audición. Lamentablemente, éste y otros estudios comprobaron que las infecciones oculares pueden ser recurrentes durante la infancia, pero en general los niños que vuelven a tratarse con los dos medicamentos no sufren la pérdida de la visión.

Algunos bebés tratados desarrollaron de todas maneras incapacidades permanentes, debido posiblemente a que el tratamiento con los medicamentos no puede revertir los daños en el cerebro o en los ojos producidos antes del nacimiento.

La mayoría de los bebés infectados que no presentan síntomas al nacer no tienen la posibilidad de recibir tratamiento temprano, ya que no se les diagnostica la enfermedad hasta que desarrollan una infección ocular u otros problemas, algunas veces meses o años después de su nacimiento.

Preguntas Frecuentes

¿Hasta cuándo me puedo embarazar después de una infección por Toxoplasmosis?
Cuando una mujer en edad reproductiva recibe la confirmación o diagnóstico de que tiene una infección por Toxoplasmosis que es reciente, es importante que sepa que no existe un tiempo determinado, pero se aconseja esperar cuando menos 6 meses a partir de la fecha en que fue diagnosticada.

¿Cómo puedo prevenir la toxoplasmosis durante el embarazo?
Antes del embarazo: Por suerte, una mujer embarazada puede tomar una serie de precauciones sencillas que pueden reducir las probabilidades de que se infecte. Toda mujer que puede quedar embarazada debe seguir estas precauciones, puesto que más de la mitad de todos los embarazos no son planificados.
Algunas mujeres le solicitan a su médico que les hagan la prueba de TORCH, ya que quieren saber si están inmunes a ciertas enfermedades como la rubéola. Esta prueba es muy útil porque si la persona no ha padecido la enfermedad y existe una vacuna para prevenirla, el médico  la puede aplicar en el momento adecuado antes del embarazo.

Las mujeres que están planeando embarazarse deberán platicar  con su médico y exponer sus dudas sobre la Toxoplasmosis congénita, sobre todo si tienen gatos en su casa o han estado en contacto últimamente con gatos de la calle, para  determinar si es necesario realizar las  pruebas en sangre.

Las mujeres que corren más riesgo de adquirir la toxoplasmosis congénita, son las que  no la han padecido y piensan embarazarse, o bien están inmunodeprimidas y por consiguiente deben de seguir las medidas de prevención que su médico indique y asistir a su consulta prenatal.

En nuestro país, no se llevan a cabo pruebas de rutina para detección de toxoplasma antes del embarazo ya que las pruebas son costosas y podrían dar resultados  falsos positivos (cuando ya se ha tenido la infección y la persona ha desarrollado anticuerpos) o ser mal interpretadas.

Prevención durante el embarazo: Muchas parejas se deben preguntar cómo puede cuidarse la mujer embarazada para no contraer esta infección, sobre todo cuando se ha comprobado que nunca la ha padecido. Se puede prevenir evitando algunas fuentes conocidas y tomando algunas medidas de precaución.

La materia fecal de los gatos y la carne cruda o poco cocida son las fuentes más comunes de infección. Si estás embarazada, debes evitar todas las fuentes conocidas de infección. Las siguientes recomendaciones pueden resultarte  útiles.

  • No comas carnes crudas o poco cocidas, especialmente de cordero o cerdo. No debe tener un color rosa y los jugos deben ser transparentes. Congelar la carne durante varios días antes de consumirla también ayuda a reducir el riesgo de infección.
  • Lávate las manos inmediatamente con agua y jabón después de manipular carne cruda. Nunca te toques los ojos, la nariz o la boca con las manos potencialmente contaminadas. Nunca la pruebes antes de que esté bien cocida.
  • Limpia las tablas de picar y todas las superficies de trabajo y los utensilios con agua caliente y jabón después de que hayan estado en contacto con carne cruda o frutas y verduras sin lavar (que pueden estar contaminados con tierra que contiene materia fecal de gatos).
  • Pela o lava bien todas las frutas y verduras antes de comerlas.
  • No vacíes ni limpies la caja donde el gato hace sus necesidades. Pídele a otra persona que lo haga. Un gato infectado (que por lo general parece sano) puede eliminar el parásito en su materia fecal. La caja debe vaciarse todos los días, ya que el parásito depositado en la materia fecal del gato no se vuelve infeccioso hasta después de 24 horas.  Si no hay otra persona que pueda ocuparse de la caja del gato, debes usar guantes y lavarte bien las manos después de vaciarla.
  • No le des de comer al gato carnes crudas o poco cocidas.
  • Deja al gato dentro de la casa para impedir que cace pájaros o roedores (que pueden estar infectados con el parásito y transmitirlo al gato). Si tu gato acostumbra a vivir en tus jardines y de los vecinos, probablemente está en contacto con gatos infectados. Busca ayuda para que alguien cuide de él y tú evita su contacto.
  • No tengas un gato nuevo durante el embarazo. No toques los gatos de la calle, especialmente las crías (que tienen más probabilidades de estar infectadas que los gatos más grandes).
  • Utiliza guantes al trabajar en el jardín. Mantén las manos lejos de la boca, los ojos y la nariz y lávatelas cuidadosamente al terminar tus tareas. No dejes los guantes cerca de productos alimenticios.
  • Evita los areneros donde juegan los niños, los gatos pueden utilizarlos para hacer sus necesidades.
  • Mantén tu hogar  libre de cucarachas  roedores y moscas.
  • Evita el consumo de huevo crudo y de leche que no esté pasteurizada
  • Tus mascotas deberán estar  bajo la vigilancia del veterinario.
  • No permitas que tus gatos se suban a las mesas donde se prepara la comida.

Dado que la mayoría de las veces la infección primaria puede no dar síntomas, muchos médicos acostumbran realizar varias pruebas de anticuerpos durante el embarazo (trimestrales). Consulta a tu médico.

¿Hay un riesgo más elevado en mi embarazo porque tengo toxoplasmosis y estoy en el segundo trimestre de embarazo?
Cuando la madre está infectada entre la semana 10 y 24 de gestación, el riesgo de problemas severos en el recién nacido es de 5 a 6%. Cuando la madre se infecta al final del embarazo, las probabilidades de que el bebé tenga problemas son menores.

Si mi bebé nació sin ningún síntoma de toxoplasmosis congénita, ¿significa que la infección de toxoplasmosis durante el embarazo no le afectó?
Los niños con toxoplasmosis congénita no parecen diferentes al nacer. Pero los estudios a largo plazo demuestran que el 90% desarrolla problemas incluyendo pérdida de la visión, problemas para escuchar y retraso del desarrollo. Estos síntomas pueden ocurrir meses o varios años después del nacimiento. Por esta razón, los niños con toxoplasmosis congénita deberán ser tratados para la infección durante el primer año de vida y después realizarse periódicamente pruebas para identificar algún problema.

Toxoplasmosis Ocular (también llamada Coriorretinitis por Toxoplasmaes la causa más común en todo el mundo, de la Inflamación Intraocular.

Probabilidad de que se repita

La toxoplasmosis congénita ocurre únicamente cuando la madre tiene una infección activa.

Durante el embarazo, en general, no existe un aumento de riesgo para el bebé cuando la toxoplasmosisse presenta seis meses antes de la concepción.

Si se tuvo en el pasado, generalmente ya se tiene inmunidad (defensas naturales contra la enfermedad) y el bebé no tendrá ningún riesgo. Pero si su sistema inmunológico está disminuido por cualquier causa (como puede ser el SIDA), sí podría desarrollar nuevamente la enfermedad.

Referencias

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